Como ocurrió el año pasado con Fernando Calero, esta temporada ha sido la del surgimiento del defensa de 20 años Mohammed Salisu. A pesar de su corta edad, el jugador ghanés ha conseguido dar la talla y convertirse en una figura importante para la zaga blanquivioleta.

Tras pasar por las categorías inferiores del club, Salisu fue el elegido para suplir al central vallisoletano que se marchó esta temporada al RCD Espanyol. Al principio, surgían muchas dudas con respecto a la decisión de Sergio González de alinear a un jugador con tan poca experiencia en la competición, pero no hicieron falta muchos partidos para que el ghanés se ganara a la afición pucelana con muy buenas actuaciones jornada tras jornada. Sin duda alguna, se ha convertido en uno de los jugadores clave de este Real Valladolid.

Salisu es un central de los que te ofrecen una seguridad y una jerarquía en el centro de la defensa indiscutible, y que junto al asentado Kiko Olivas forman una pareja casi perfecta en la zaga. Analizando aspectos más técnicos, el joven ghanés va muy bien al corte y destaca en el juego aéreo gracias a su 1,91 m de altura, ya no solo a la hora de despejar balones, también a la hora de rematar jugadas a balón parado, incluso ya ha marcado un gol así frente al Eibar.

La única pega que se le puede poner a este jugador es en el momento de sacar el balón jugado desde atrás, algo en lo que si destacaba Fernando Calero, pero eso se debe a la falta de experiencia y lo más probable es que en un futuro lo mejore. Lo que está claro es que Mohammed Salisu será uno de los jugadores revelación de la temporada y que estará en boca de muchos aficionados y equipos de este deporte.