Lo amoldó a sus manos por primera vez cuando tenía 22 años, con esa sonrisa propia de un niño con zapatos nuevos que diez años después luce con más madurez pero con la misma ilusión que entonces. Poco imaginaba Lionel Andrés Messi Cuccittini aquel 1 de diciembre de 2009 cuando levantaba su primer Balón de Oro en el Teatro Chatelet de París, que en apenas diez años repetiría esa imagen una y otra vez hasta llegar a las seis. Una imagen, la de su sexto cetro dorado a manos de la prestigiosa revista France Football, que el pasado 2 de diciembre volvía a elevar al rosarino al olimpo futbolístico como el único de la historia en ser corroborado como el mejor del mundo en seis ocasiones. 

2009: Messi corona el sextete

Con una evolución más que significativa tanto en lo estético como en lo futbolístico, Leo Messi ha consolidado en apenas una década un auge nunca visto antes en la historia del deporte rey, consagrándose como el futbolista más determinante de todos los tiempos de un modo meteórico. El reinado de ese tímido argentino que en el año 2000 dejaba su Rosario natal para embarcarse en su sueño de patalear el balón en La Masia se instauró materialmente en el 2009, cuando con 22 años y tras conducir al club de su vida a un histórico sextete lograba su primer Balón de Oro. Lo hacía tras haber irrumpido con fuerza en el panorama futbolístico cuatro temporadas atrás en un Barcelona sin rumbo cierto, pero en el que con Ronaldinho como mentor comenzó a sintonizar con el Camp Nou recordando al mítico Diego Armando Maradona. Sus primeras similitudes con el "Pelusa" llevaron a Leo a abrirse brecha en su tercer año como profesional, en el que logró erigirse como el tercer mejor futbolista del mundo, en un podio en el que reinaba el brasileño Kaká, y en el que un año más tarde escalaría para establecerse como el tercer mejor futbolista, tan sólo por detrás de su antagonista Cristiano Ronaldo.

La Champions de 2009, clave para el reconocimiento de Leo. FOTO: FC Barcelona
La Champions de 2009, clave para el reconocimiento de Leo. FOTO: FC Barcelona

Asumiendo galones para comandar una histórica temporada con Pep Guardiola a la cabeza, en la que la ciudad condal celebró el primer triplete- Liga, Copa del Rey y Liga de Campeones- de su historia, Messi escalaba por primera vez a la cima del olimpo futbolístico en 2009. 38 goles, suficientes para liderar una memorable actuación colectiva de un equipo que se ganó el reconocimiento mundial, bastaron al argentino para vislumbrar al mundo del deporte rey, que con 473 votos lo acreditó como el mejor de ese año, convirtiéndose en el sexto futbolista del FC Barcelona en recoger el galardón, algo de lo que sólo presumian en la historia culé Luis Suárez, Johan Cruyff, Hristo Stoichkov, Rivaldo y Ronaldinho. Su primer cetro, confirmaba también lo que muchos predecían tras el adiós del talento de Ronaldinho de Can Barça: Leo Messi era el nuevo 10. 

2010: La Masía se tiñe de oro

Los azulgranas Xavi Hernández y Andrés Iniesta se sumaron al astro aregntino en su segundo galardón de mejor futbolista del mundo. El de 2010 suponía el reconocimiento a una más que meritoria temporada del conjunto culé pese a una trágica eliminación en las semifinales europeas, pero que se saldaba con la consecución de una histórica temporada regular en la que los de Pep Guardiola sumaron 99 puntos. El argentino lideró las opciones de los suyos, acompañados de la calidad de las dos batutas del centro del campo, que además se coronarían como campeones del mundo en el primer Mundial para España. Los 34 goles del "10" azulgrana prevalieron ese año sobre la corona de Xavi e Iniesta con su selección a la hora de honrar al mejor futbolista, algo que despertó polémica desde ciertos sectores. Sin embargo, la imagen que dejaron Leo Messi, Xavi e Iniesta supuso un hito histórico para el club culé, que vislumbró por vez primera el reinado de tres de sus futbolistas, todos ellos forjados en La Masia. Así, la cantera culé, estandarte identitario del Pep Team, se consagraba como una fábrica envidiable de talento, sustentando a la probablemente mejor generación de futbolistas de la historia.

Messi, Xavi e Iniesta, un podio para la historia. FOTO: FC Barcelona
Messi, Xavi e Iniesta, un podio para la historia. FOTO: FC Barcelona

2011: De Wembley a la gloria

Con el argentino como máximo representante, el fútbol incontestable de los de Pep Guardiola volvió a reinar en 2011 en el mítico estadio de Wembley, en lo que ante el Manchester United de Sir Alex Ferguson volvió a suponer una nueva exhibición en el viejo continente para recibir por cuarta vez en la historia del club la UEFA Champions League. Acompañado por David Villa y Pedro Rodríguez en un tridente que elevaba al fútbol azulgrana a su máximo explendor, Leo Messi volvió a instaurarse como gobernador del fútbol mundial al alzarse con su tercer Balón de Oro de manera consecutiva. Los 53 goles e incontables exhibiciones del rosarino se plasmaban en un nuevo reconocimiento que ratificaba el talento innato del futbolista culé, principal artífice de un elenco destinado a la hemeroteca mundial como fue el de Pep Guardiola.

Fue en la última temporada del de Santpedor al frente del banquillo azulgrana cuando el "10" lograría lo imposible: establecer su reinado por cuarto año consecutivo. Así es, el 7 de enero de 2013, París volvía a entregar el cetro futbolístico a Leo Messi, hito que culminaba el incontestable monopolio del argentino y reconocía el esplendor futbolístico de su Barça, que en apenas cuatro temporadas lograba la envidiable cifra de 14 títulos.

2015: El año del tridente

En la sombra del astro argentino durante su hegemonía de cuatro años, el portugués Cristiano Ronaldo lograba arrebatar en 2013 la condición de mejor futbolista a su principal combatiente. Coincidiendo con la marcha de Pep Guardiola del banquillo culé, que cedió a su heredero natural Tito Vilanova, relevado en la siguiente temporada por el "Tata" Martino el Barça comenzó una etapa de transición en la que el liderazgo de Messi y los suyos no fue suficiente para volver a establecerse en lo alto del fútbol europeo y mundial. Dos temporadas atípicas en Can Barça, que sirvieron para que su estandarte cogiese fuerzas y liderara de nuevo el rumbo culé con la llegada de Luis Enrique Martínez al banquillo culé.

Messi, Luis Suárez y Neymar, artífices de un triplete para la historia. FOTO: Noelia Déniz
Messi, Luis Suárez y Neymar, artífices de un triplete para la historia. FOTO: Noelia Déniz

El asturiano, con pasado azulgrana, llegaba con la tarea previsiblemente complicada de equilibrar las fuerzas de tres egos del fútbol mundial, que se juntaban para formar un tridente demoledor. Frustrando las expectativas de algunos, Leo Messi se congenió a la perfección con Luis Suárez y Neymar Júnior para formar una delantera letal, que logró imperar en Europa consiguiendo un nuevo e histórico Triplete para el club azulgrana. Con una versión más demoledora que sutil, el Barça  encumbró en la 2014/2015 una temporada histórica con el argentino a la cabeza, que logró la meteórica cifra de 58 goles en un curso en el que además sumó su gol número 500 como culé. Estas cifras, sumadas al excelente rendimiento exprimido por sus compañeros de ataque, sirvieron para que Leo recibiera su quinto balón de oro.

2019: El sexto, cuatro años después

Tras el segundo triplete culé, llegó el monopolio incontestable del Real Madrid en Europa, que se alzó con tres Champions League consecutivas, un hito qué coronó al conjunto blanco, dirigido por Zinedine Zidane, como el mejor de todos los tiempos, con doce cetros europeos, y a su máximo estandarte, Cristiano Ronaldo hasta en dos ocasiones como mejor futbolista del curso. La última de las gestas blancas, sin embargo, rompió el duopolio establecido por Messi y Cristiano. En 2018, el croata Luka Modric se convertía el primer futbolista en lograr un Balón de Oro relevando la hegemonía de los dos cracks. La marcha de Cristiano Ronaldo del Real Madrid, sin embargo, propició un cambio de rumbo en Chamartín, que vió como su equipo se quedaba sin títulos la pasada temporada. El escenario resultó idóneo para que Leo Messi, líder indiscutible del FC Barcelona, ahora con Ernesto Valverde a la cabeza, se apoderara de nuevo de su cetro. 

La exhibición ante el Liverpool, clave para el sexto Balón de Oro de Messi. FOTO: Noelia Déniz
La exhibición ante el Liverpool, clave para el sexto Balón de Oro de Messi. FOTO: Noelia Déniz

El 2019 no resultó sin embargo un año dulce para el Barcelona, que cayó estrepitosamente eliminado de la Champions League a manos del Liverpool, como ya lo hiciera un año atrás ante la Roma, y cedió en la última cita de la temporada ante el Valencia. Sin embargo, un nombre brilló por encima del resto, y ese fue Leo Messi, que en plena crisis de identidad de su equipo, se enfundó el traje de superhéroe para dirigir el rumbo de los suyos. Su actuación en noches europeas como ante el propio Liverpool en el Camp Nou y su talento innato propiciaban, por sexta vez la rendición del planeta fútbol a los pies de su máximo exponente: Lionel Andrés Messi Cuccittini.