Para hacer olvidar el pinchazo ante el Athletic y su empate poco recompensado en el Clásico, los de Zinedine Zidane han hecho borrón y cuenta nueva en este inicio de año con el fin de retomar esa buena dinámica que les estaba caracterizando. Además, con motivo de estas fechas, los jugadores han solicitado como regalo a los Reyes Magos un gol cuya carencia estaba siendo el problema más importante que ha hecho que el equipo no estuviera en la senda de la victoria.

El Getafe, en líneas generales, no mereció perder ante un Madrid que se veía superado ante un equipo con unas líneas de presión altas que impedían a los de Zidane salir con el balón jugado y controlar el partido. Una victoria que tampoco consiguió gracias a las intervenciones de un excepcional Courtois bajo palos.

Imperial Varane

Los dos primeros tantos del encuentro fueron provocados por Varane. El primero tras una segunda jugada en la que Mendy centró a un área en la que David Soria erró en una mala salida disputada por el central francés también. El gol condicionó el resultado en contra de los de Bordalás, y finalmente fue concedido tras su posterior revisión como gol en propia puerta del guardameta. Un Getafe que apretó dispuesto a no dejar escapar el partido.

El segundo, a su misma vez, llegó de nuevo en una jugada a balón parado que sirvió Kroos con sutileza, para que fuese Varane el que sentenciara con un poderoso testarazo imparable por potencia para David Soria.

En tercera instancia y bajo la ausencia del capitán Sergio Ramos, formando pareja en defensa con Militao, el francés se ha confirmado de nuevo como un central sólido, con pocos fallos y que se ha mostrado imperial y poderoso en ambas áreas.

Foto vía Instagram @raphaelvarane
Foto vía Instagram @raphaelvarane

El muro belga

Otro partido más en donde de nuevo fue Courtois el salvador del partido y la figura del encuentro junto a su compañero Varane. Señalado en muchas ocasiones como el culpable de los problemas en defensa de un Madrid, en el que ya se siente a gusto, y en el que actualmente está demostrando su mayor nivel como guardameta.

Con paradas meritorias el belga es una jornada más uno de los arqueros más en forma de lo que va de Liga, y una de las claves de este Real Madrid tan sólido en defensa.

Foto vía Instagram @laliga
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Mismas carencias

Una tarde más, el Real Madrid se hace ver como lo que actualmente es: un equipo sólido pero sin gol. Y es que en esta victoria es demostrado una vez más lo que es el fútbol en su esencia, goles. Un Real espeso en todas las facetas de creación de juego y que se ha visto superado por la presión del Getafe, pero que ha conseguido 3res goles productos de jugadas aisladas.

Este equipo ha demostrado en reiteradas ocasiones la ausencia de un goleador tras la ausencia de Cristiano Ronaldo. Karim Benzema, quien ha tomado el rol de estrella del equipo, ha aumentado sus cifras de gol en estas dos últimas temporadas. El francés solo no puede cumplir con toda una cuota de gol que se espera de otros jugadores como el ausente por lesión Hazard.

Una carencia que hace del equipo uno menos competitivo, y es que sin goles no se ganan los partidos.

Un Valverde generoso

Fede Valverde, suplente, entró en el terreno de juego en el 71', y aparte de su ya conocido sacrificio en el medio del campo, otorgó un nuevo destello que hace valer su polivalencia.

En el minuto 96 el uruguayo inició una carrera en laque tras cruzar todo un campo rival perseguido de camisetas azules, el "pajarito" decidió otorgarle un regalito a un Luka Modric que le acompañaba.

Un tercer gol que sirve como guinda a un pastel que el Real Madrid ya estaba saboreando.