El Pucela está atravesando un momento delicado en este final de la primera vuelta en la competición liguera. El equipo se encuentra decimocuarto con 21 puntos fuera de la zona de peligro, pero no han ganado ni un partido desde la victoria ante el Mallorca en la jornada 12.

Si es cierto que cuatro de esos resultados han sido empates y contra equipos fuertes como la Real Sociedad o el Valencia, pero esto no es motivo de alivio para los chicos de Sergio González. No hay duda en que algo falla en el esquema blanquivioleta y por eso no llegan los resultados positivos a Zorrilla. A continuación, se analizará las posibles causas de esta complicada racha.

El principal problema es la falta de gol en la escuadra vallisoletana, concretamente por parte de los delanteros. El Valladolid lleva 17 goles a favor, únicamente por delante de los equipos en zona de descenso. Estos son datos alarmantes ya que determina la escasez de eficacia en los artilleros blanquivioletas, aunque parece que Enes Unal ha dado un golpe sobre la mesa tras el doblete ante el Leganés la pasada jornada. Y es que el turco, junto a Sergi Guardiola, han conseguido marcar 7 goles en total (3 y 4 respectivamente) lo que son cifras insignificantes para una dupla de delanteros que se entienden y complementan bien, así lo han demostrado en numerosas ocasiones. Un chasco está siendo el que vino para ser el delantero estrella, Sandro, que a pesar de dejar buenos detalles, solo ha anotado un gol en lo que va de temporada.

Defensivamente, el equipo es una pieza consolidada que solamente comete fallos puntuales, pero a la hora de atacar los pucelanos tienen más problemas para sacar la pelota jugada y seguir el ritmo del partido, como si fuera un engranaje atascado que le cuesta volver a funcionar correctamente.