Una vez conocida la convocatoria de Rubi para la eliminatoria de Copa del Rey, meses después de haber abandonado el Rayo Vallecano, se confirma que Álex Moreno regresará a Vallecas, y lo hará defendiendo los colores del conjunto visitante. El ahora lateral del Betis volverá al campo que tanto le ha visto crecer a lo largo de las temporadas que se ha enfundado la elástica franjirroja. Mucho ha dado de sí su estancia en el barrio obrero madrileño desde 2014 hasta el verano de 2019.

Álex Moreno regresa a la que hace unos meses era su casa

En julio de 2014, llegaba un atacante de 21 años muy prometedor al Rayo Vallecano. Con experiencia en la categoría de plata tras su paso por el Mallorca, un Álex Moreno con muchas ganas de debutar en la élite, y con la sonrisa y la ilusión por bandera, quería sacar a pasear su calidad y velocidad en Primera División, esa que ya había disfrutado Son Moix durante la temporada 2013-2014. Hasta el 14 de septiembre de 2014, frente al Elche, no se le pudo ver en acción, cuando Paco Jémez le hizo estrenarse en la máxima categoría saliendo desde el banquillo. Aunque hubo que esperar hasta el cuatro de diciembre de 2014 para que anotara su primer gol con la franjirroja, ante en Valencia en Copa del Rey. Esta fue la única diana que marcó aquel curso en el que apenas dispuso de oportunidades, ya que estuvo sobre el verde 635 minutos distribuidos en 13 partidos.

Álex Moreno celebrando su gol ante el Valencia | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.
Álex Moreno celebrando su gol ante el Valencia | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.

Ante la falta de minutos, la mejor opción era salir cedido a un equipo de Segunda División durante la temporada 2015-2016 para ganar confianza y experiencia en la categoría de plata, y el club contra el que debutó en Primera, el Elche, fue el elegido. Moreno llegaba a un conjunto que acababa de recibir un duro varapalo administrativo tras el descenso, y con una plantilla corta que mezclaba juventud y veteranía, el cuadro ilicitano quería levantar cabeza. A las órdenes de Rubén Baraja, el habilidoso zurdo se ganó un puesto fijo como extremo izquierdo, permitiendo a la afición del Martínez Valero disfrutar de su control de balón, desborde y velocidad. Precisamente aquella campaña se vio el primer destello del ahora lateral, ya que, ante una expulsión inesperada de Noblejas, el 'Pipo', optó por colocarle en esta demarcación, tratando de que la baja del madrileño se notara lo menos posible. Tras 41 partidos, dos goles y cuatro asistencias, se fogueó lo suficiente como para regresar al Rayo Vallecano con ganas y motivos suficientes como para asentarse en el once titular.

Álex Moreno celebrando un gol con el Elche | Fotografía: La Liga
Álex Moreno celebrando un gol con el Elche | Fotografía: La Liga

Regresó al Rayo Vallecano cuando el club madrileño acababa de descender a Segunda División, una categoría que Moreno ya conocía bastante bien. Comenzó a las órdenes de Sandoval como revulsivo, saliendo en la mayoría de ocasiones en las segundas partes para dar aire fresco en facetas ofensivas, y cuando partía de inicio no solía acabar los 90 minutos. Con la llegada de Baraja todo cambió, y poco a poco comenzó a tener mayor peso en el equipo. El técnico, que ya conocía sobradamente las cualidades del zurdo, fue quien le reconvirtió al lateral izquierdo, implantándole poco a poco los conceptos defensivos sin que perdiera sus habilidades en el ataque. Con Míchel, posteriormente aún fue más protagonista, quien le mantuvo en la misma demarcación que ideó el 'Pipo'. En la temporada 2016-2017 participó en un total de 38 choques (cuatro goles y cuatro asistencias) entre competición doméstica y Copa del Rey, y al fin conseguía ese objetivo tan ansiado a base de trabajo y buenas actuaciones, ser fundamental en los esquemas del entrenador. Y lo logró teniendo la dificultad añadida de adaptarse a un nuevo puesto que necesita otras prestaciones para estar a la altura.

Álex Moreno celebrando un gol con el Rayo Vallecano | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.
Álex Moreno celebrando un gol con el Rayo Vallecano | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.

La siguiente temporada fue uno de los jugadores más utilizados por Míchel, llegando a saltar al verde en 40 partidos de los 42 que consta la competición doméstica, disputando un total de 3.501 minutos. Marcó tres goles, dio tres asistencias y fue el mejor lateral izquierdo de la Liga SmartBank, pero todo esto queda en meras estadísticas cuando se nombra una fecha; 27 de mayo de 2018. Es recordar este día y la sonrisa de un rayista se muestra, y el protagonista de que esto ocurra no es otro que Álex Moreno. Corría el minuto 40 en el Estadio de Vallecas, en juego la jornada 41 de Segunda División frente al Lugo, y Trejo, para sorpresa de los allí presentes, sacaba de banda, un rol que solía ser del '7'. El argentino vio perfectamente colocado al lateral que, con mucha picardía y templanza a la vez, apareció por banda izquierda, se coló hasta dentro del área, y fue capaz de armar la zurda para mandar el balón al fondo de las mallas con un chut imparable para el guardameta rival. 1-0 y el entonces jugador franjirrojo celebraba, mientras las gradas, repletas, estallaban de júbilo, la Primera División estaba aún más cerca. El marcador no se movió desde entonces, y gracias a la diana marcada por él, se lograba el séptimo ascenso. Además, una semana después, este tanto fue fundamental para que los madrileños se alzaran con el título de campeones de la categoría de plata, siendo el primer trofeo oficial de la entidad en toda su historia.

Álex Moreno celebrando el gol que significaba el séptimo ascenso del Rayo Vallecano a Primera División | Fotografía: La Liga
Álex Moreno celebrando el gol que significaba el séptimo ascenso del Rayo Vallecano a Primera División | Fotografía: La Liga

Con la etiqueta de ser 'el héroe del séptimo ascenso', Moreno regresaba años después a Primera División. Lo hacía siendo mucho mejor futbolista, sabiendo aprovechar una de sus mejores cualidades, la velocidad, y con mayor habilidad para encarar y superar en el uno contera uno a jugadores de la élite. En el curso 2018-2019 siguió siendo una de las piezas fundamentales para Míchel en el lateral izquierdo, perdiéndose únicamente un encuentro por enfermedad, y jugando los 90 minutos del resto. El técnico también le utilizó como carrilero en alguna ocasión para sacar mayor partido a sus prestaciones ofensivas, aunque el zurdo es un jugador muy solidario también en tareas defensivas, y eso era un plus para una zaga formada por tres centrales. Con la llegada de Paco Jémez, quien le hizo debutar en la máxima categoría, su rol cambió levemente, jugando menos minutos (acabó siendo el integrante del Rayo con más minutos sobre el verde), y posicionándose de nuevo en alguna ocasión como extremo, pero sin tener un sustituto que rindiera a su nivel en la que ahora es su demarcación natural. En una temporada que finalizó de la peor manera posible, con el descenso a Segunda División, el ganador del premio Jugador 5 Estrellas 2018-2019, otorgado por Mahou, participó en 36 partidos, repartiendo dos asistencias y anotando el que hasta el momento es su único gol en la Liga Santander, ante el Athletic Club en San Mamés.

Álex Moreno celebrando su gol ante el Athletic Club | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.
Álex Moreno celebrando su gol ante el Athletic Club | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.

No fue hasta el 21 de agosto de 2019 cuando Álex Moreno se despidió del Rayo Vallecano y del estadio al que volverá el jueves 23 de enero de 2020. Los rayistas, a lo largo de 127 partidos oficiales con la elástica franjirroja (nueve dianas y nueve asistencias), le han visto debutar, portar el '27', el '6' y el '7', por orden cronológico, marcar el gol que significó el último regreso a Primera División, e incluso llevar el brazalete en dos ocasiones la última temporada. Unos aficionados que le han visto sonreír cuando ganaba o celebraba sus goles o los de sus excompañeros, o mientras cantaba 'La Vida Pirata', y también llorar o derrumbarse cuando se perdía o no se avanzaba lo suficiente en la clasificación. El lateral creció en Vallecas a la vez que hacía divertirse a la hinchada de su velocidad, desborde, regate, control de balón, capacidad de asociación y muchas más cualidades que ha podido desplegar sobre el verde. El 'héroe del ascenso' vuelve al lugar donde recibió una sonora y sentida ovación como despedida cuando se marchó al banquillo la última vez que participó en un encuentro oficial con la camiseta del club madrileño el pasado 12 de mayo de 2019, y lo hará con la firme intención de que su nuevo equipo avance en la Copa del Rey, pero también de hacer disfrutar de su fútbol al mismo barrio que devolvió a la élite.