Ya es oficial. Pablo Piatti deja el Espanyol tras rescindir su contrato que le unía al club perico hasta el verano de 2020, y inicia su aventura en la MLS a sus 30 años en uno de los equipos más destacados de la liga como es el Toronto FC. El jugador argentino llega al equipo canadiense con la carta libertad, y como uno de sus jugadores franquicias para la próxima temporada que dará inicio el próximo 29 de febrero.

Pablo Piatti en las dos últimas temporadas no estaba teniendo mucho protagonismo, en parte a las graves lesiones que ha tenido que superar. La más grave de todas le llegó el pasado 9 de febrero de 2019 en el partido frente al Rayo donde el jugador argentino se tuvo que marchar antes de tiempo por lesión, después de romperse por completo el ligamento cruzado y sufrir un esguince en el ligamento lateral interno. Una lesión que desde entonces lo ha mantenido fuera de los terrenos de juego hasta diciembre del 2019, donde se encontró una situación complicada con la llegada de los fichajes y el cambio de técnicos, que lo dejó sin casi protagonismo en el equipo perico.

Es por eso, que ante la falta de minutos el propio Piatti y Espanyol han llegado a un acuerdo para rescindir su contrato, que precisamente terminaba en junio de este 2020. De esta forma, el Espanyol resuelve uno de los numerosos casos de jugadores que terminan contrato en junio, y también se libera de una de las fichas mas elevadas de la plantilla. El Espanyol con la salida del argentino deja su balance del mercado invernal en cuatro altas y cuatro bajas. 

Pablo Piatti deja el equipo perico después de tres años y medio en la que ha disputado un total de 105 partidos, marcando 16 goles y repartiendo 18 asistencias. Muy buenos y rentables números  teniendo en cuenta que al Espanyol le costó tan solo un millón de euros su pase procedente del Valencia. Ahora pondrá rumbo a la MLS, concretamente al Toronto donde coincidirá con otro viejos conocidos de la Liga española como son Pozuelo y Altidore, y con una de las leyendas del futbol americano como Michael Bradley.