El Barça femenino sufrió mas de la cuenta en los cuartos de final de la Copa de la Reina frente al Deportivo de A Coruña, en un partido que se decidió en el último minuto de la prórroga con un gol de Kheira Hamraoui que hizo que el Estadi Johan Cruyff explotara lleno de felicidad e ilusión. El equipo azulgrana, con esa victoria sobre la bocina, consiguió asegurar su pase a las semifinales de la Copa del Rey. Una de las encargadas en transmitir las sensaciones del vestuario azulgrana tras el partido fue Mapi León, la central zaragozana que volvía a jugar con el Barça después de perderse el partido del fin de semana para reservarse para la competición copera.

La jugadora 'culé' empezó su comparecencia llamando a seguir trabajando, ya que pese a que son superiores en las dos principales competiciones nacionales en juego, no se han de confiar y han de seguir intentando conseguir la victoria: "Ha sido un buen ejemplo de que no todo es tan fácil, que las cosas hay que trabajarlas. Esto es un buen entrenamiento también. Aparte de que sabe muy bien, ya que hemos pasado semifinales, sino que también es una manera de decir que no están fácil, e incluso nosotras también somos personas, que estamos acostumbradas a ganar, porque esta temporada está yendo todo muy bien, y parece que es todo muy fácil, pero no", indicó.

Tras ello, Mapi León habló acerca de la sensación que tuvo en cuanto el balón entró a la portería del Deportivo empujado por Kheira Hamraoui: "No se puede describir con palabras. Son cosas que tienes que vivirlas. Hemos sentido una alegría tremenda, pero son cosas que se viven en el campo y es muy difícil expresarlo con palabras", afirmó. Pero antes de eso, el esférico se resistía a entrar en la portería, algo que veía la central desde su posición, y no dudó en compartir su pensamiento respecto a esa situación de una forma muy expresiva: "No lo he pasado bien. Se nos estaba resistiendo el gol, que nos estaba costando. Hemos generado mucho, pero ha sido de esos días en los que dices 'que no entra', y seguramente hubiera entrado uno, y dijeras 'ah, pues ya entra'. Igual desde fuera ha sido muy divertido, pero yo desde dentro he sufrido", reconoció. 

La jugadora azulgrana habló también acerca de la principal dificultad con la que se encontraron en el partido; la muralla del Deportivo, que supo frenar todos los ataques del Barça: "Se estaba buscando bien los espacios, ellas estaban súper cerradas atrás, y los espacios estaban por fuera. Era muy difícil meter balones dentro. Era muy complicado. Creo que lo hemos leído más o menos bien, y creo que si miras las estadísticas seguramente los remates, centros y todo, será positivo", afirmó.

Para terminar, habló acerca de la posibilidad de que hubiera habido una tanda de penaltis en caso de que el Barça no hubiera conseguido ganar el encuentro. La jugadora azulgrana admitió que sintió preocupación ante la lotería de los once metros: "Al final jugártela en los penaltis hay un factor de fortuna o acierto. Sí que había miedo pensando en que en las últimas eliminatorias ha sido el equipo menor el que ha ganado", indicó.