Nuevo capítulo de Numancia Vintage que nos lleva a la temporada 2014/15, con Juan Antonio Anquela como entrenador. El último choque del año 2014 deparó a los sorianos un partido de poder a poder, con dos equipos lanzados al ataque, en el que el conjunto gallego, dirigido por Quique Setién, desperdició una renta de tres goles en los últimos minutos, para acabar cediendo un empate. Numancia y Lugo no se conformaron con la igualada y pudieron llevarse el partido con dos ocasiones en el último minuto que acabaron atrapadas por los guardametas de ambos equipos.

Munir fue el portero del Numancia aquella noche. Gaffoor, Juanma, Isidoro y Bonilla estarían en la línea de cuatro, con Íñigo Pérez, Julio Álvarez, Del Pino y Vicente en el centro del campo. Natalio y Sergi Enrich comenzarían como hombres más adelantados.

Primera parte igualada entre ambos equipos

La primera parte estaría ligada a lo común que puede suceder dentro de un terreno de juego. El Lugo se adelantaría gracias a una majestuosa vaselina de Iago Díaz en una salida en falso de Munir nada más comenzar el partido. El Numancia empató con un penalti transformado por Julio Álvarez por agarrón sobre Sergi Enrich. Todo quedaría en el aire para una segunda parte de escándalo, con cinco goles para ambos equipos, un total de diez, en lo que se recuerda como uno de los duelos más vibrantes de la historia en la categoría de plata del fútbol español.

Diez goles en cuarenta y cinco minutos

Se adelantaría el Lugo en un saque de esquina. Pelayo Novo cabeceaba adelantándose a su par para llevar el 1-2 al electrónico. Los lucenses volverían a golpear en un contraataque finalizado por Aganzo en el segundo palo, 1-3. En estas recortaría distancias Carlos Aranda al aprovechar un buen balón de Julio Álvarez desde tres cuartos de campo, 2-3. Iago Díaz volvía a batir a Munir por bajo desde dentro del área grande, 2-4, pero Sergi Enrich aprovechaba una asistencia de Natalio para volver a reducir distancias, 3-4.

Entonces, parecía que el Lugo asestaba los dos golpes definitivos a las esperanzas numantinas con sendos tantos de Pelayo y David López. El primero, al rematar una falta lateral, el segundo, tras un fallo de Isidoro en el despeje, 3-6.

Cualquier otro equipo se habría rendido con ese marcador adverso, tres goles de desventaja y solo diez minutos por delante de encuentro. Pero ya conocen la frase, Numancia no se rinde, y así fue. En tan solo cinco minutos, el equipo soriano igualó la contienda.

Sergi Enrich establecería el 4-6 al luchar un balón en el punto de penalti y batir al portero visitante. Carlos Aranda conseguiría el 5-6 con un disparo potente desde la frontal del área y, el propio Aranda serviría en bandeja el 6-6 a Natalio en el segundo palo, para llevar el delirio a la grada numantina.

Todo hacía presagiar que ambos conjuntos se conformarían con el 6-6 pero nada más lejos de la realidad. Munir evitó el que hubiese sido el 6-7 del conjunto lucense y, en el contraataque de esa jugada, Natalio pudo haber conseguido el 7-6 en un mano a mano que falló el delantero valenciano. Aranda y Natalio tuvieron nuevamente el gol soriano pero no hubo suerte, y todo quedó en unas tablas que difícilmente se olvidarán a orillas del río Duero.