Abdullah ben Nasser Al-Thani ha protagonizado nuevos movimientos en el juzgado, a pesar del estado de alarma que hay declarado en España estas últimas semanas por la crisis de la pandemia, el jeque ha pedido celeridad para la resolución del recurso contra la administración judicial.  Tras haber conocido que el pasado martes se desestimó el nombramiento de Richard Shaheen como interventor del club, hay nuevos movimientos con respecto a la administración del Málaga CF.

Los abogados del jeque y de sus tres hijos Nayet, Nasser y Rakan como miembros del consejo de administración del club, interpusieron el pasado 2 de marzo un recurso de apelación contra el auto de la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de la capital malagueña que decretó el 19 de febrero la administración judicial del Málaga. En esta fecha el club fue intervenido tras la querella que interpuso la Asociación de Pequeños Accionistas (APA) del Málaga contra la familia Al-Thani por presunta apropiación indebida y administración desleal.

Ante esta situación el máximo accionista del equipo blanquiazul intervino mediante un comunicado, en el que aseguró que rechazaba "las acusaciones" y alegaba "que la administración judicial del club y de la sociedad NAS es ilegal, inidónea y desproporcionada, carece de pruebas o evidencias concretas, vulnera derechos fundamentales y ya está causando perjuicios al club". Escrito que se mantiene vigente y que el jeque pretende acelerar.

Así pues, el gabinete jurídico continúa intentando lograr que la familia Al-Thani recupere el control del Málaga y se suspenda la administración judicial del Málaga, que ahora se encuentra en manos de José María Muñoz, que recientemente cumplió un mes al frente de la gestión del Málaga. Han elevado un escrito con la finalidad de que el recurso contra la administración se celebre con la mayor brevedad posible puesto que se trata de un asunto penal.