Quedarse en casa es una premisa que con el confinamiento que atravesamos coge más sentido que nunca. No es nada nuevo, sin embargo, para el entrenador del filial del Fútbol Club Barcelona Francisco Javier García Pimienta, quien ha hecho de la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí su leño. En la Masía, donde llegó a los doce años para formarse como futbolista, el barcelonés de 45 años se ha impregnado de los colores azulgrana, que hoy tiñen su corazón, y de su filosofía. Sus dieciocho años como técnico en Can Barça de una de las entidades más prestigiosas del planeta fútbol corroboran su adhesión con un estilo innegociable, que a día de hoy trata de transmitir a sus jugadores del filial, dónde llegó hace ya dos temporadas para reenderezar el rumbo del último paso antes de llegar a la élite profesional. Tras crecer junto a la generación de la "Quinta del Mini", Pimi sabe perfectamente lo que es representar a su Barça en todas las categorías, y lo transmite dia a dia a sus futbolistas, que tienen clara la premisa que no es posible llegar a lo más alto sin trabajo.

La Masia, cimiento del éxito culé

Un trabajo, el de García Pimienta que ha repercutido claramente en la dinámica del filial barcelonista en su rumbo por el grupo III de la Segunda División B, donde ha hecho bandera de sus estandartes para alcanzar el segundo puesto del campeonato. Uno de ellos, del que más puede presumir el técnico azulgrana, es el de la confianza en los cimientos, en esa cantera que año tras año demuestra tantos éxitos y que no cesa en su empeño de triunfar un dia como lo hicieron sus mayores. Y es que "Pimi" es sin duda alguna es el principal abanderado de ese estilo irrechazable que busca el club culé ahí donde va, el de formar a sus jugadores en estilo y en valores. De ahí su empeño por hacer progresar a aquellos que más se lo merecen, algo que ha demostrado desde que llegara al banquillo del filial en 2018.

García Pimienta y su cuerpo técnico no pierden de vista a la cantera. FOTO: Noelia Déniz
García Pimienta y su cuerpo técnico no pierden de vista a la cantera. FOTO: Noelia Déniz

Afincado en la segunda posición de su grupo en la división de bronce, el plantel culé se postula como una de las sensaciones de la temporada siendo uno de los conjuntos más jóvenes del campeonato. Buena parte de la culpa de ello es la trascendencia que están teniendo los canteranos en los planes de García Pimienta, que no duda en recurrir a la calidad del Juvenil cuando lo necesita. A pesar de desprenderse esta campaña de canteranos como Carles Pérez o Alejandro Marqués, el Barça tiene ante sí un valor inquebrantable, como es el tesoro de la Masía.

La explosión de Ilaix Moriba

Entre estas perlas destaca la de Ilaix Moriba, uno de los nueve juveniles que han debutado de la mano de "Pimi", que en lo que va de curso ha dado la alternativa a los más jóvenes ante las necesidades que han despertado las numerosas lesiones del filial. El guineano se estrenaba como artillero el pasado 8 de marzo ante el Llagostera en el Estadi Johan Cruyff, haciendo valer la calidad que ha propiciado la confianza del técnico en él. De hecho, el talentoso extremo de tan sólo diecisiete años, ya ha comparecido hasta en ocho ocasiones con el Barça B desde que debutara a principios de temporada ante el Ejea. Una eclosión similar a la que ha tenido su compañero en el Juvenil Ansu Fati, que sin embargo ha recalado de manera fugaz en el primer equipo.

Ilaix Moriba, junto a Peke, uno de los juveniles que despuntan en el Barça B. FOTO: Noelia Déniz
Ilaix Moriba, junto a Peque, uno de los juveniles que despuntan en el Barça B. FOTO: Noelia Déniz

Junto al internacional sub-17 español, han sido ocho los juveniles que han debutado en esta campaña con García Pimienta. El último en hacerlo, uno de los nombres más prometedores de la Masia, como es el delantero de 20 años Gerard Fernández. Más conocido como "Peque", el punta catalán saltó a la titularidad el pasado mes de febrero ante el Villarreal B, logrando una diana en su primera aparición como futbolista del filial. Antes, y en este mismo curso, también se consagraron por primera vez como jugadores de la Segunda División B Jandro, Konrad, Nils, Arnau Tenas, Nico, Mika y Antonio Jesús, que completan la larga lista de juveniles que han salido a la luz de la mano de Javier García Pimienta.