Roberto Carlos es una leyenda para el madridismo. El lateral brasileño llegó a Madrid el 1996 con tan solo 23 años, en aquel entonces el equipo estaba en manos del italiano Fabio Capello.

Sus 11 temporadas lo convirtieron en el extranjero con más partidos en la historia del club blanco. El héroe de la banda izquierda ganó varios títulos con la camiseta blanca, entre ellos tres Champions (la Séptima, la Octava y la Novena), pero para él la séptima fue la más especial, “Si tuviera que elegir mi momento favorito de mis años en el Real Madrid, sería aquel triunfo”, afirma Roberto en el artículo “La Buena Vida” de “The Players Tribune”.

  • Llegada a Madrid

Roberto Carlos nunca había visitado Madrid, no fue hasta el verano del 1996 después de jugar un año en el Inter de Milán que el Real Madrid se interesó por él. Roberto explica en el artículo que el primer día en su nueva ciudad le hicieron una foto en la Plaza Cibeles que nunca olvidará, “Cuando veo esa fotografía, me recuerda cómo empezó mi loca experiencia con el Real Madrid. Aún la tengo en casa”, afirma.

Aunque después de firmar el contrato con el equipo todo pasó muy rápido, Roberto recuerda perfectamente cómo fueron sus inicios, el debut, el primer gol fuera de casa ante el Deportivo La Coruña y la primera vez que jugó en el Santiago Bernabéu delante de 80.000 personas, ese día "fue uno de los mejores días de mi vida”, ratifica.

  • Relación con el presidente Lorenzo Sanz

La relación del brasileño con Lorenzo Sanz era muy buena, ejercía como un padre. “Solo el recuerdo de Lorenzo ya me hace sonreír. Aunque era un presidente, por encima de todas las cosas era un aficionado. Vivía para el Real Madrid, estaba siempre muy involucrado”, explica Roberto Carlos.

  • La séptima

Habían pasado dos años desde la llegada, Roberto ya se había habituado a la presión que conlleva jugar en un equipo de esa categoría, pero estaba a punto de enfrentarse contra la Juve en la final de la Champions League. Igual que ahora el Real Madrid era el equipo con más títulos de la Champions pero hacía 32 años que no la ganaban, si conseguían vencer a la Juventus, la favorita del encuentro, se llevaban la Séptima.

“La noche anterior a la final ninguno de nosotros pudo dormir. Normalmente nos íbamos a la cama a las 10 de la noche, pero aquella noche estábamos sentados en el lobby a las cuatro de la madrugada. No teníamos miedo, pero sí mucho respeto por la Juve,  nos sentíamos ansiosos para que el juego empezara de una vez”, explica en el artículo.

Pese a que la Juve tuve muchas ocasiones, el Real Madrid se mostró superior al equipo italiano, el partido se terminó con un 1-0, gol de Mijatovic. Aquella noche el Ámsterdam Arena temblaba, en Madrid no se podía circular por las calles, por fin la Plaza Cibeles volvía a ver un título que no se conseguía desde el 1966. 

  • Últimos días en el club blanco

El último partido de Roberto Carlos en el club blanco fue el 17 de junio de 2007, aquel día el Bernabéu recibía al Mallorca, era la última jornada de la temporada. En aquellos momentos aún no había campeón de Liga, Madrid y Barcelona estaban empatado a puntos. Todo podía ocurrir, pero si ambos ganaban el título se iba a Madrid, el “gol average” era de los blancos. Así sucedió, el Real Madrid ganó la Liga.

Los aficionados le dieron afecto hasta el último día, “David Beckham también se marchaba, todos nos deseaban lo mejor, nos mandaban besos y abrazos”. Según Roberto allí es cuando se dio cuenta de lo que había hecho por el club y de lo que la afición le amaba.

Fuente: realmadrid.com
Fuente: realmadrid.com
  • El confinamiento

Roberto está viviendo en Madrid debido a su trabajo como Director de Relaciones Institucionales y asegura que nunca había visto la ciudad como ahora. “En lo personal, el virus no me ha afectado. Mi familia y yo estamos sanos. Pero estoy triste por las familias de todos los que han muerto.” En este sentido Roberto muestra su tristeza por el fallecimiento de Lorenzo Sanz ,“el mes pasado el virus se cobró la vida de Lorenzo Sanz, él fue el hombre que me trajo al club.