Joao Miranda y Diego Godín. Brasileño y uruguayo. El muro con el que Diego Simeone comenzó a forjar su leyenda. Uno contra el Madrid, en el Bernabéu. Otro contra el Barcelona, en el Camp Nou. Uno en Copa del Rey. Otro en Liga. Uno rompiendo una racha de 14 años sin ganar al eterno rival. Otro terminando con la de 18 años sin lograr el título liguero. Ambos firmaron su día glorioso un 17 de mayo. Uno en 2013. Otro en 2014. 365 días entre ambos. 17 de mayo, San Atlético de Madrid.
Joao Miranda
Cuatro años. 178 partidos, cinco títulos, dos temporadas siendo la defensa menos goleada del campeonato liguero y 13 goles en todas las competiciones. El más importante, en el Bernabéu. Final de Copa 2012/13. El Atlético de Madrid se enfrentaba a su eterno rival, su bestia negra, 14 años y 25 partidos sin ganar era una losa terrible que primero fracturó Diego Costa a pase de Falcao, y que terminó por reventar este defensa enjuto con un cabezazo a pase de Koke que terminó en la portería de Diego López, y que finalizó, no sólo con 14 años de abatimiento rojiblanco, sino también con el período de José Mourinho en el banquillo del Real Madrid.
Diego Godín
Por su parte, Diego Godín llegó un año antes que Miranda y se marchó cuatro años después, con lo que se mantuvo a lo largo de todo el período glorioso del Atlético de Madrid en esta última década. 389 partidos, ocho títulos en nueve años de los que en seis salió siendo partícipe de la defensa menos goleada de LaLiga. Y 27 goles, muchos de ellos importantes, como el de la final de Champions de Lisboa que pudo dar su primera 'Orejona' al Atlético de Madrid el 24 de mayo de 2014.
Pero el gol que sí trajo un ansiado título fue apenas siete días antes, el 17 de mayo de 2014. Última jornada de LaLiga en la que se enfrentaban en el Camp Nou los dos únicos equipos que optaban a lograr el entorchado liguero. Al Atlético de Madrid le valía el empate. Al Barcelona sólo le servía la victoria. Alexis Sánchez había adelantado a los azulgranas, y el Atlético de Madrid estaba en disposición de perder un título del que se había hecho acreedor merced a una temporada impoluta.
En esto que, comenzada la segunda parte, hubo un córner a favor del equipo rojiblanco, esa tarde de amarillo. Si algo había explotado el Atlético de Madrid ese año eran las jugadas de estrategia. Y ante el saque de esquina de Gabi, emergió de entre toda la maraña de jugadores que se concentraban en el área del Barcelona un uruguayo, un Diego Godín que de un testarazo inapelable, introducía el balón en la portería de Pinto y firmaba el acta de defunción de un Barcelona que aún tuvo una oportunidad con un gol de Messi, pero que fue anulado por fuera de juego.
Vendetta blaugrana
Pero no todos los 17 de mayo fueron felices para el club colchonero. Justo un año después, el 17 de mayo de 2015, Messi y su tropa se tomaron justa venganza en el Vicente Calderón, logrando una victoria por 0-1 que les otorgaba el título de Liga, y que fue la antesala del triplete (Liga, Copa del Rey y Champions) logrado por los de Luis Enrique. El gol, de Leo Messi.
Schwarzenbeck
Y hay un 17 de mayo aún más doloroso para la memoria rojiblanca, aunque tapado por lo ocurrido dos días atrás. Toca remontarse al año 1974. Se habla, claro está, de la primera final de Copa de Europa que disputó el Atlético de Madrid ante el Bayern de Múnich. Ese día se jugó el partido de desempate tras acabar la final con empate a uno el 15 de mayo de 1974. El partido finalizó 4-0, y la Copa de Europa viajó a tierras germanas. Sin embargo, es curioso que el día marcado como fatídico para los rojiblancos fue el día que Schwarzenbeck anuló con su desesperado disparo desde fuera del área el gol que minutos antes había anotado de falta Luis Aragonés y que hizo tocar la ansiada "Orejona" casi con la yema de los dedos, y no el día que realmente el sueño se evaporó, el 17 de mayo de 1974.
A pesar de ello, las gestas de Miranda y Godín, unido al alto rendimiento que dieron durante su estadía en la entidad madrileña, hicieron que ambos jugadores ascendieran al olimpo colchonero y que cada 17 de mayo sea un día importante para club y afición rojiblanca. 17 de mayo, San Atlético de Madrid.