El partido del retorno es un duelo fratricida. El Atlético de Madrid visita el Nuevo San Mamés con la firme intención de cosechar tres puntos que le metan de lleno en la pelea por los puestos que dan acceso a la Champions de la próxima temporada. La pandemia y el estado de alarma pausaron el estado de euforia alcanzado por los colchoneros al eliminar al Liverpool (vigente campeón) en los Octavos de Champions. 

Por su parte, el Athletic de Bilbao espera con las uñas bien afiladas la visita de los colchoneros, también con la moral al alza, toda vez que recibieron el parón por la pandemia tras conseguir el pase a la final de la Copa del Rey y golear a domicilio al Valladolid (1-4) en un encuentro que sirvió (aunque entonces ni el mismo protagonista lo imaginaba) para ver en acción por última vez a un currante del gol, un Aritz Aduriz que disputaba sus últimos minutos como león y como jugador en activo en el José Zorrilla. El coronavirus le impedirá retirarse a lo grande, le privará de poder disputar esa final de Copa del Rey y, quién sabe, coronar su prolífica carrera con un título. No obstante, el homenaje que el Nuevo San Mamés le dispensará cuando la normalidad y las aficiones puedan volver a acomodarse en las localidades de los estados compensará esa pérdida, la disputa de una final en el último partido de su carrera.

Para el partido contra el Atlético de Madrid, los leones de Gaizka Garitano vienen preparándose duro ya que, como bien sabe Dani García, los colchoneros llegarán como aviones. Y si cierto es que el Atlético de Madrid precisa de los tres puntos para lograr su objetivo de acabar en puestos Champions, no lo es menos el hecho de que si el Athletic de Bilbao tiene una mínima posibilidad de alcanzar posiciones de Europa League (ahora mismo está a cinco puntos), esto pasa por derrotar al conjunto de Simeone. 

Algo que no va a ser nada sencillo, pues las estadísticas arrojan datos demoledores. Y estas dicen que desde que se inauguró el Nuevo San Mamés, el Athletic de Bilbao sólo ha logrado la victoria en una ocasión, la temporada pasada (2 - 0, goles de Córdoba y Kenan Kodro). El resto de resultados, un empate y cinco victorias colchoneras.

Así y todo, el Nuevo San Mamés es un feudo donde el Athletic se hace fuerte, habiendo logrado hasta la fecha ocho victorias, algunas de enjundia como ante el Barcelona (tanto en LaLiga como en Copa del Rey, los blaugrana hincaron rodilla), Villarreal o Real Sociedad. Tres empates y otras tantas derrotas cierran las estadísticas ligueras del Athletic actuando como local.

Para este partido, Gaizka Garitano recupera a Unai Núñez y Ander Capa, que cumplieron ciclo de amonestaciones ante el Valladolid. También vuelven De Marcos y Asier Villalibre, recuperados de sendas lesiones. Queda en duda Lekue por su esguince de tobillo, más la consabida baja de Aduriz. Por contra, continúan en 'alerta amarilla' Iñigo Córdoba y Yuri Berchiche tras ver amonestación ante el Villarreal y salir indemnes ante el Valladolid.

Teniendo pues a casi la totalidad de la plantilla, Gaizka Garitano se ha dedicado a preparar el partido contra el Atlético programando varias sesiones de entrenamiento, hasta cuatro sesiones completarán los leones, algunas a las 14:00 horas, para adaptarse al horario en que se disputará el encuentro. 

A conciencia se está preparando Garitano el encuentro. Tal es así que no ha permitido la presencia de cámaras en algunos entrenos. Quiere coger por sorpresa a los chicos del Cholo y toda precaución es poca. Aún así, Garitano tiene una idea bastante reconocible y teniendo a toda la plantilla disponible es probable que confíe en su once de gala para el retorno a LaLiga, si bien lo comprimido del calendario puede provocar que haga variaciones para mantener frescos y alertas a todos los componentes del plantel. Aún así, es probable que la formación que confronte de inicio al Atlético de Madrid esté compuesta por Unai Simón en portería, línea de cinco con tres centrales (Iñigo Martínez, Unai Núñez y Yeray) y dos carrileros  profundos (Capa y Yuri). Sala de máquinas para Vesga y Dani García, ayudados por el trío de centrales conforman un bloque sólido y complicado de superar. Capa y Yuri comparten banda con la velocidad de Williams y Muniaín, dejando a Raúl García como referencia para bajar balones y surtirlos a Williams y Muniaín o rematarlos directamente. Y para la brega. El navarro es garantía de trabajo y sacrificio, bien lo sabe el próximo rival

En definitiva: solidez defensiva, velocidad en punta y mucha brega, armas del Athletic de Bilbao para volver por la puerta grande a la competición. Enfrente, una roca pétrea casi infranqueable. Un equipo a imagen y semejanza de su entrenador, intenso, dinámico y solidario, pero también con mimbres para mimar la pelota. Será un partido de altos vuelos. Un encuentro con la mira puesta en Europa. Vuelve LaLiga. Y de qué manera. Athletic de Bilbao - Atlético de Madrid. No habrá aficionados en las gradas, pero sí veintidós gregarios del esfuerzo dejándose hasta la última gota de sudor en el campo. En el Nuevo San Mamés. ¡Que empiece el show!