La temporada del Granada CF de Diego Martínez sigue agrandando la figura del entrenador gallego. Con el empate de anoche en el estadio Benito Villamarín, el cuadro rojiblanco igualó la mejor puntuación de su historia, aunque esta vez tendrá aún nueve jornadas por delante para mejorar el registro. Esta es la tercera temporada en la que alcanza esta cifra. Las dos anteriores coinciden con los dos primeros años del club en Primera tras la vuelta después de treinta y cinco años a la élite del fútbol español.

En 2012, bajo el mando de Abel Resino, que sustituyó a Fabri a los mandos del primer equipo granadinista, los nazaríes alcanzaron la salvación en la última jornada tras perder ante el Rayo Vallecano, pero se beneficiaron de la victoria del Atlético de Madrid con gol de Falcao en el Madrigal. Por otra parte, en el año 2013 y tras un inicio convulso de la mano de Juan Antonio Anquela, Lucas Alcaraz cogió los mandos de la nave rojiblanca y comenzó con una gran victoria ante el Real Madrid en casa. Finalmente, el equipo se salvó en la penúltima jornada a pesar de la derrota en Mestalla al darse los resultados necesarios para la permanencia.

Esta temporada, Diego Martínez está logrando consolidar un gran bloque de futbolistas para alcanzar el objetivo – de manera virtual por ahora – de la permanencia con diez jornadas por delante, tras la victoria ante el Getafe el pasado viernes. Con el empate en Heliopólis, la marca de puntaje quedó empatada y tendrá un mes y nueve partidos para seguir alargando el registro. Europa está en el horizonte y ya es una posibilidad más que real para los rojiblancos. El próximo viernes en Los Cármenes tendrán la primera oportunidad de batir el récord ante el Villarreal,  a las 19:30 horas, en un duelo que será clave precisamente para conseguir el objetivo de la competición continental.