Evidentemente, una victoria hubiera sido el mejor escenario para el conjunto de Sergio González, pero sabía que con sacar un punto ya se colocaba a ocho del descenso y evitaba que su rival, el Celta, le recortara distancias por abajo en la tabla. Con esa idea, el Pucela no quiso arriesgar, manteniéndose sólido en defensa, como acostumbra, sin conceder mucho al rival y manteniendo la portería a cero ante un rival con problemas en ataque esta temporada.

Una sola vez tiraron a puerta los locales, sin excesivo peligro. Poco o nada propuso el conjunto blanquivioleta en ataque, que prefirió gastar sus esfuerzos en defensa. Toni Villa fue quien más intentó, sin ser su mejor partido.

La otra cara de la moneda fue en defensa, donde se mantuvo firme el equipo, sin conceder muchas ocasiones al equipo gallego. El guardameta Jordi Masip hizo un gran papel, despejando un gran disparo de Iago Aspas desde la frontal del área y, más tarde, un penalti, entre alguna otra ocasión de peligro.

Durante la segunda parte, Sergio decidió dar descanso a Óscar Plano y Guardiola, que fueron titulares en el último encuentro frente a Leganés, y a Míchel y Toni Villa. Entraron al campo Fede San Emeterio, Pablo Hervías por la banda derecha, Waldo por la izquierda, y Ben Arfa. Este último, a quien la afición tenía muchas ganas de ver sobre el terreno de juego, tras llegar en el mercado invernal como una estrella, no tuvo mucho protagonismo, y es que tampoco puede pedirse del jugador que revolucione un partido si el resto del equipo no acompaña. Parece que el francés no encaja con el estilo que propone el entrenador, pero aún se espera que Sergio pueda sacar provecho al jugador en las jornadas que restan.

El equipo vuelve a encontrarse en la situación en la que ya se ha encontrado más veces, donde le cuesta encontrar portería y depende de la defensa para sumar puntos. Está claro que no podrá seguir siendo así contra rivales más complicados como los que están por venir, y Sergio González tendrá que dar con la tecla adecuada para pelear los partidos en ambas áreas y salvar matemáticamente al equipo del descenso.