Venía teniendo poco protagonismo en los últimos encuentros. Hoy Lopetegui le dio la oportunidad, y la aprovechó con dos goles, y un gran partido.

Óliver Torres fue el nombre propio del partido en Butarque. Tras el pitido final, el ex del Oporto se mostró muy feliz por poder ayudar al equipo: "Cuando se juega de inicio y salen las cosas bien, uno se siente muy feliz por sumar y por ayudar al equipo, en este caso haciendo dos, que nunca lo había hecho".

Sobre su efusividad en la celebración de los tantos, comentó : "cada partido cobra una importancia vital. Por eso la rabia en los goles, porque creo que el equipo estaba mereciendo más y cada vez queda menos. Nos da confianza para lo que viene".

Óliver no es un jugador que acostumbre a convivir con el gol, por eso fue preguntado por su inesperado doblete frente al cuadro pepinero: "Ojalá pudiera meter goles cada día, hoy me he encontrado con buenas sensaciones tras varios partidos sin jugar, lo he afrontado con muchísima ambición e ilusión. Nos vamos con buenas sensaciones".

Valorando el trabajo colectivo, destacó la buena interpretación del equipo en todo momento, y la dificultad de sumar de a tres frente a un rival que se juega la vida: "En la primera parte el equipo ha interpretado muy bien el partido, sabíamos donde estaban los espacios y hemos salido con una dinámica muy buena. En el segundo tiempo es cierto que ellos han apretado mucho."

Muy elegante, elogió al Leganés, recalcando la calidad de sus futbolistas:  " Son un gran equipo, están ahí por circunstancias pero tienen jugadores de muchísima calidad, y es normal que te lleven a su terreno."