El vínculo contractual de Mario de Luis con el Rayo Vallecano venció el pasado 30 de junio, por lo que su fichaje por el Real Madrid pasó a ser un secreto a voces que posteriormente confirmó el propio jugador en su cuenta oficial de Instagram. En adición, el portero de 18 años regresa a la que fue su casa tras cuatro años lejos de Valdebebas en los que se ha curtido y forjado como jugador de fútbol profesional. De esta forma, el internacional sub-18 queda vinculado a la institución madridista durante las próximas cuatro temporadas, es decir, hasta 2024. Asimismo, se trata de un fichaje a coste cero para el escuadrón merengue, ya que Mario de Luis y el Rayo Vallecano separaron sus caminos una vez concluyó el vínculo que unía a ambas partes.
Durante la aventura de Mario de Luis en el Rayo Vallecano, el joven mirlo blanco ha ganado experiencia, puesto que en varias ocasiones ha sido convocado como tercer portero por el primer equipo del cuadro madrileño. Además, siempre ha sido considerado como un jugador diferencial y determinante a largo plazo en su demarcación. La seguridad que ofrecía al equipo, en especial a la defensa, y sus buenos reflejos a la hora de atajar balones pronto se transformaron en sus principales armas. En la misma línea, el guardameta formado en el Real Madrid también destaca por su buen juego de pies, algo impropio en los porteros todavía en edad formativa. Todo ello, sumado al conocimiento que Mario de Luis ya posee sobre el correcto funcionamiento del fútbol formativo en el equipo blanco, hacen de una mera contratación, un fichaje de quilates para la portería del Juvenil A.
Mario de Luis reforzará la meta del Real Madrid Juvenil A los próximos cuatro cursos. Asimismo, el portero español disputará la competición doméstica y será un habitual en las convocatorias del escuadrón blanco para disputar la UEFA Youth League, competición por excelencia a nivel continental. Con la vuelta del ya exjugador del Rayo Vallecano, la entidad merengue suma una nueva pieza para lo que ya es considerado como un proyecto ganador destinado a dominar la competición europea por antonomasia.