Desde la llegada de Unai Emery al banquillo del submarino, la ilusión no ha hecho más que ir en aumento en Villarreal. El gran final del año pasado, junto a la llegada de un gran técnico y los refuerzos que han traído, han hecho que las expectativas sean altas de cara a este curso.

En la pretemporada, los resultados no han sido los mejores, dos victorias y tres derrotas. Aún así, en estos partidos el resultado pasa a un segundo plano. Lo más importante es coger forma y probar diferentes sistemas y posiciones para preparar lo realmente decisivo, que son las tres competiciones.

El del domingo es un partido de los que el Villarreal debe ganar para llegar donde quiere a final de temporada. Jugando en casa, y ante un recién ascendido, los tres puntos no se le pueden escapar. Aunque no hay que subestimar al Huesca, que ascendió como primero en una liga tan difícil como la SmartBank.

En cuanto a los nuevos fichajes, se espera que algunos sean de la partida ante el equipo maño. Dani Parejo ha sido titular en cuatro de los cinco partidos previos, y sería de extrañar no verle en el once. A su lado es probable que juegue Coquelin, que ha formado junto a él en varios encuentros y parece partir un pasito por delante de Vicente Iborra en la pelea.

El recién llegado Gero Rulli tendrá que esperar su oportunidad, ya que se prevee que Asenjo empiece la temporada como titular bajo palos. La incógnita es Take Kubo. El japonés ha jugado bastantes minutos y podría ser titular, aunque hay mucha competencia en ataque. Su principal competidor será Samu Chukwueze, ya que ambos acostumbran a ocupar la banda derecha.

Una primera prueba ante la que hay mucha expectación, y de la que podremos empezar a sacar conclusiones, teniendo en cuenta que la temporada es muy larga y no se puede juzgar demasiado viendo únicamente el primer encuentro.

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