Necesitaban 16.520 avales de los socios para llevar a cabo la moción de censura contra el presidente Josep Maria Bartomeu y su Junta Directiva. Sin embargo, los promotores de la iniciativa lograban recoger en apenas dos semanas y nadando a contracorriente un total de 20.371 firmas, es decir, 3.851 papeletas más que el límite marcado en los estatutos del FC Barcelona.

Alcanzado el mínimo exigido, es el turno del FC Barcelona, que comenzará con el proceso de validación de todas las papeletas presentadas en las oficinas del Camp Nou. Una vez el notario realice la comprobación de todas las firmas recolectadas, se levantará el acta correspondiente con el número exacto de papeletas homologadas. Es por eso que el gran margen de 3.851 papeletas de más cobra más importancia que nunca para la moción de censura.

Sin embargo, para continuar con el proceso y en caso de ratificar el límite de firmas marcadas, serán los socios los encargados de aprobar la moción. Para ello serán necesarios dos tercios de los votos de los socios en contra de la actual Junta para sellar el cese de la directiva de Josep Maria Bartomeu. Con luz verde en una votación que debería anunciarse entre los siguientes diez y veinte días hábiles, una Junta Gestora sería la encargada de hacerse cargo de la entidad de forma provisional hasta la convocatoria de nuevas elecciones.

Cabe destacar que las 20.371 firmas recogidas suponen la cifra más alta de la historia para el impuso de una moción de censura. “Si tuviera 20.000 opositores en contra, más del 20% de los socios, yo no seguiría", afirmaba Marc Durch, uno de los promotores, tras presentar las firmas. "Ha sido una locura, un gran trabajo de todos. Al presentarla yo creía que lo lograríamos porque vi el cansancio que había en los socios", confesaba Jordi Farré, otro de los portavoces e impulsores de la moción.