Si bien es cierto que Osasuna arrancó con las ideas claras, y con una clara idea de juego, conforme pasaron los minutos, esa idea se fue diluyendo, tanto por mérito del rival como por demérito propio. El Levante en cambio, mantuvo la idea de juego planeada por el técnico Paco López todo el partido, con gran intensidad, mucho control del balón y pases a la espalda de los defensores rojillos, los cuales poco pudieron hacer ante las genialidades de Campaña y Morales.
Al igual que en el encuentro anterior contra el Getafe, el equipo navarro ofreció un gran juego durante los 15-20 primeros minutos del partido, teniendo incluso varias ocasiones de peligro y de gol, pero conforme pasaron lo minutos se notó un bajo nivel de juego en los jugadores.
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La primera parte
Durante tramos del primer tiempo se vio a dos equipos muy enganchados al partido, con gran intensidad en el juego, y con unas ideas muy marcadas y con ganas de llevarlas a cabo. Así fue como empezaron a llegar las ocasiones, Osasuna por medio de balones largos y buenas bajadas de balón por parte de Calleri y centros por la banda derecha de Nacho Vidal y Roberto Torres. Las ocasiones del Levante llegaron por medio de las botas de Campaña, del cual salió prácticamente toda ocasión clara de peligro a la portería rival.
A medida que fue pasando la primera parte se vio a un Levante más cómodo con el balón, y que sabía que tenía que hacer con él, mientras que Osasuna seguía intentando esos balones en largo y ese juego por las bandas, pero esta vez estaban siendo tapados por el equipo “granota”.
Con el gol marcado por Roberto Torres a falta de no más de 7 minutos para el final de la primera mitad, parecía que Osasuna iba poder llegar al descanso con ventaja, y así plantear otro tipo de partido para la segunda mitad, pero Morales y Melero tenían otro plan. El gol anotado por Melero tras un gran centro de Morales, dejó a un Osasuna frío y descolocado para el final del primer tiempo.
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La segunda parte
Al igual que ante el Getafe, el despropósito rojillo llegó en la segunda parte, con un juego sin ideas por parte de los jugadores, ningún planteamiento diferente por parte de Jagoba respecto a todos los balones que estaba metiendo el Levante a las espaldas de los centrales, y sin un medio del campo que crease juego alguno. Además, se añadió también la pobre segunda parte de Raúl Navas, que provocó un penalti totalmente innecesario y que pudo hacer más en el segundo gol del Levante.
Por su parte, se vio a un gran Sergio Herrera, que atajó varios balones importantes y además el penalti provocado por Raúl Navas. Poco pudo hacer con respecto a los 3 goles encajados. El gran trabajo del arquero se vino abajo nuevamente por la pobre actuación de la defensa.
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Problemas en defensa
En tal solo tres jornadas de liga que lleva el conjunto navarro, en dos de ellas se han visto problemas a la hora de defender, inseguridades que nada tenían que ver con la defensa del año pasado, y varios errores que le han salido caros en forma de pérdida de puntos. Contra el Getafe fueron Roncaglia y David García, con varios errores durante el partido, y dos errores graves en el gol encajado. Y en el partido contra el Levante, se vio cómo los jugadores del equipo granota les cogían muy fácil la espalda mediante la filtración de pases al hueco o pases en largo, además de varios errores de comunicación y de marcas en dos de los tres goles encajados. Uno de los destacados en este aspecto es Raúl Navas, al cual le vio lento corriendo hacia atrás, le pillaron la espalda muchas veces con suma facilidad, y además, cometió un penalti que de no ser por Sergio Herrera, hubiese significado otro gol más en el marcador.
Jagoba sigue sin dar oportunidades a Unai García, pese a estar viendo el bajo nivel de dos de sus centrales, como son David y Raúl, y parece que la cosa no va a cambiar. A falta de que no haya salidas en el club no parece que vayan a llegar más jugadores, pero teniendo en cuenta el bajo nivel de la defensa esta temporada y la poca confianza de Jagoba en Unai, se debería buscar un central de garantías, al menos para cuando los Aridane no pueda jugar algún partido.