Diego Martínez, claramente emocionado tras lo vivido frente al Malmö, intervino en la rueda de prensa postpartido para reflejar lo ocurrido este histórico jueves para el granadinismo.  El técnico gallego, que ha conseguido llevar al Granada CF desde Segunda División hasta la fase de grupos de la Europa League en tres años, mostró "su felicidad inmensa" tras el pase a la fase de grupos de la Europa League, algo inaudito en la historia del equipo andaluz.

El míster de los rojiblancos horizontales valoró de "injusto el resultado al final de la primera parte" ya que se encontraba su equipo mejor que los suecos sobre el campo. "Tuvimos personalidad, sabiendo frenar su inicio, y lo solventamos con buen juego. Ha sido un encuentro muy completo del equipo, y conseguir el acceso a Europa League, para este grupo de personas, es algo extraordinario”, dijo respecto al choque.

Sobre el gran debut por Europa, Diego ha señalado que para ser debutantes en la Europa League "esto era un reto" y lo han cumplido "con creces", "enseñando que este equipo no tiene meta y que es muy ambicioso".

“Teníamos que controlar nuestra propia emoción, pero así es el fútbol, aunque me pareció injusto por el gran trabajo de los jugadores. Pero, estoy muy satisfecho por la imagen", señaló el capitán del barco nazarí que alentó en el descanso a sus jugadores. 

También tuvo bonitas palabras para sus aficionados, a los que les dijo que notaron "su energía" en todo momento y que este hito también es parte de ellos. También hizo un inciso para dedicar esta épica a Pepe Macanás, consejero del cuadro nazarí, quien creyó mucho en el equipo desde Segunda División. "Sé que lleva unos días sin dormir por este momento. Cuando me escuche sé que se va a poner a llorar, por lo tanto que se anime", refirió el vigués sobre Macanás.