El vicepresidente económico del Fútbol Club Barcelona, Jordi Moix, ha presentado este lunes la situación económica con la que ha cerrado el club la temporada 2020/2021, marcada por la afectación de la pandemia a nivel mundial, y sobretodo en los clubes de fútbol. El directivo azulgrana ha remarcado la incidencia del COVID-19 en todos los ámbitos de la sociedad y ha recalcado la caída de los ingresos por parte del club.

“Esta crisis ha incidido de manera directa en nuestro club, no sólo a nivel interno sino por la convivencia con nuestros aficionados”, así reflejaba Moix las cifras en pérdidas que ha sufrido el planeta futbolístico en los últimos meses. La reducción de ingresos ha implicado, según explica el vicepresidente azulgrana, una reducción, entre otros, de parte de los salarios de las plantillas por parte de los clubes, como también se ha visto obligado a hacer el Barcelona. En este sentido, Moix negó que haya habido una mala gestión por parte del club catalán en este sentido, sino que ha tratado de adaptarse a la situación de la mejor manera posible. Sin embargo, la deuda del club ha crecido  hasta los 820 millones de euros y las pérdidas hasta los 97 millones. Pese a las previsiones a inicio de temporada, “la situación del COVID-19 ha tenido un impacto de 203 millones de euros en los ingresos del club, menos de la mitad de lo que esperábamos a principio de temporada”, redundó Moix.

Por otro lado, tal y como destacó el propio directivo, han aumentado las inversiones patrimoniales, así como las relativas al Espai Barça, que pese a la crisis ha seguido su evolución. Así lo ha corroborado el vicepresidente económico, que ha destacado que el proyecto debe seguir adelante también con la próxima junta directiva. El Espai Barça incluye una superficie de más de 34 hectáreas, que formarán las nuevas instalaciones del Camp Nou, el Palau Blaugrana y el Estadi Johan Cruyff, que ya es una realidad.

Con público a finales de año

Para esta temporada, el club azulgrana espera reabrir las puertas del Camp Nou con un 25% de aforo a partir del próximo mes de diciembre, siempre teniendo en cuenta la progresión de la pandemia. Esto implicaría un aumento de los ingresos por parte de la entidad blaugrana, que espera poder alojar a sus aficionados ya con normalidad en febrero de 2021.