Con este parón de selecciones que está alterando el ritmo de las competiciones ligueras, el Granada CF ha visto frenado su proyección en LaLiga por ello. Con Rui Silva y Duarte en Portugal, Machís y Yangel Herrera en Venezuela y Eteki en Camerún, los pupilos de Diego Martínez, a pesar de las ausencias de los antes citados, continúan ejercitándose para estar a punto en lo que resta de año, pues el calendario se presenta muy exigente.

Diecisiete partidos, sin contar los que se desarrollen de la Copa del Rey, en dos meses será lo que deban jugar los rojiblancos horizontales en lo que resta de año. Con dos partidos por semana, habitualmente siendo jueves de Europa League y domingo de Liga, el Granada se habitará a esta nueva normalidad que agitará la dinámica llevada hasta ahora.

En lo que resta de octubre, los andaluces jugarán cuatro choques, dos en casa y los otros dos fuera. El primero en esta "vuelta" se disputará ante el Sevilla -en casa-, rival muy duro por su gran arranque liguero y por sus grandes refuerzos en este mercado veraniego. A continuación, el Granada jugará su primer duelo europeo, frente al PSV Eindhoven -fuera-, para posteriormente completar el mes con el partido frente al Getafe -fuera- de José Bordalás y PAOK griego, siendo este el primer encuentro europeo que se jugará en el Nuevo Los Cármenes.

En el mes de noviembre, los granadinos se medirán ante el Levante, Omonia de Nicosia, Real Sociedad, Valladolid, Omonia de Nicosia y Celta de Vigo,  seis partidos -tres en casa y tres fuera- en cuatro semanas, siendo dos de ellos referentes a la Europa League -los correspondientes al Omonia de Nicosia-.

Ya el último mes del año, diciembre, el Granada CF deberá jugar siete encuentros -cuatro en casa y dos fuera- , finalizando un año para la historia con partidos ante grandes equipos como son el PSV, Huesca, PAOK, Elche, Betis, Real Madrid y Valencia, teniendo una recta final muy difícil, a la par que severa y estricta.