Cuando se dice que Sergio Canales es un todoterreno no es por casualidad. Lleva jugando todo desde hace varias temporadas manteniendo su regularidad. Siempre destaca, siempre rinde al 100%, y siempre muestra su enorme calidad.

El jugador cántabro no conoce lo que es perderse un partido, salvo por lesión o sanción, desde hace cuatro temporadas. Dando sensación de que cada vez va a más. De que es el timón de un equipo que le necesita cada jornada para dar su mejor versión. Suma un total de 6.275 minutos con la elástica verdiblanca en lo poco más de dos temporadas que lleva en el club.

En su llegada al Real Betis Balompié en la temporada 18/19, sin coste de traspaso, mucho mérito a eso, tuvo el mejor registro goleador de su carrera alcanzando los nueve goles entre todas las competiciones.

Un año después consiguió unas cifras también muy destacables. Anotó seis goles, tres menos que el año anterior, pero repartió seis asistencias, y eso teniendo en cuenta que fue una temporada para olvidar. Consiguió convertirse en una de las pocas cosas a destacar en una campaña nefasta en lo colectivo.

A estos datos incuestionables hay que sumarle su debut en la Selección Española en 2019. Merecido premio a la gran labor realizada en el terreno de juego cada jornada.

Todo esto le ha convertido en un estandarte del club verdiblanco en poco más de dos años. Con galones de capitán y con personalidad para echarse el equipo a la espalda, algo que ha hecho en varias ocasiones. Mimetizado con la idiosincrasia del Real Betis Balompié, y con una implicación propia de un jugador de la cantera.

Si tras analizar todo esto, se suma que Sergio Canales ha superado tres roturas del ligamento cruzado de su dos rodillas, solo queda alabar y aplaudir a un jugador que da todo lo que tiene cada domingo. Alguien destinado a marcar una época en el club de las trece barras.