En los prolegómenos del encuentro se realizó un pequeño concierto en El Sadar para celebrar el centenario de Osasuna, aunque los aficionados solo lo pudieron disfrutar desde sus casas.

En cuanto al partido, comenzó como se esperaba. Peleado desde el primer minuto y muy trabado. En toda la primera parte solo se pudo destacar el zapatazo de Berenguer desde fuera del área en el minuto nueve. Disparo algo centrado, eso sí. Más allá de esa ocasión, el Athletic no jugó y solo se dedicó a jugar por el aire en vez de jugar a ras del césped; algo que dificultó la creatividad de sus jugadores más talentosos. Además, los de Gaizka Garitano no tuvieron esa mentalidad ofensiva que se requiere en este tipo de encuentros.

En el bando local, no se registró ningún disparo a puerta en la primera mitad. Sin embargo, crearon peligro en cada llegada que completaron por banda. Es más, estuvieron más cerca de ponerse por delante con bastante menos esfuerzo.

Un Williams en constante fuera de juego, y con jugadores con mentalidad no ofensiva, dificultó y mucho que el Athletic llegara a los metros finales. Si a eso se le suma que el planteamiento del partido desde el primer minuto fue lanzar balones al aire, se veía venir que eso no podía acabar bien.

Sin juego

Los dos equipos continuaron igual en la segunda mitad. El juego siguió siendo trabado y el juego aéreo fue constante. Además, el partido que completaron ambos conjuntos fue lento y muy previsible. Demasiado. 

A medida que el partido fue transcurriendo, los rojiblancos optaron por un papel más 'ofensivo'; pero jugadores como Williams o Muniain no aparecieron por ninguna parte. Ese salto de intensidad se magnificó en el minuto 70, pero no hubo premio en forma de gol. 

El que sí tuvo premio fue Osasuna. En el minuto 79 Ander Capa realizó un absurdo penalti dentro del área sobre Kike Barja. Una pena máxima que fue transformada en gol por Rubén García, poniendo punto y final a un partido muy gris del Athletic.

Los cambios en los últimos minutos por parte de Gaizka Garitano tampoco ayudaron al resultado. Algo ya habitual en los partidos de esta temporada del bilbaíno.