Nuevo desafío de altura para Koeman y sus futbolistas que tan solo cuatro días después de caer derrotados ante el Real Madrid en el primer clásico del curso han puesto rumbo hacia Turín para disputar una nueva jornada de UEFA Champions League. Y no era cualquier partido, sino uno de los más emocionantes de la fase de grupos, el cara a cara ante la Juventus.

Los azulgranas lo hacían con las bajas conocidas de Piqué, por sanción, y Coutinho por lesión. Pero el técnico holandés también ha dejado en el banquillo a Ansu Fati y Busquets, que acumulaban muchos minutos en este arranque de temporada. En su sitio, Koeman ha apostado por Pedri, Pjanic y Dembélé en la zona de ataque y creación, mientras que la pareja de centrales la han conformado Lenglet y Araujo.

Por su parte, Pirlo tampoco ha podido alinear a su arma más determinante, Cristiano Ronaldo, que volvía a dar positivo en Covid-19 en el último test realizado, como De Light, que se ha perdido el duelo por molestias físicas. Así arrancaba un duelo directo para liderar el grupo G de la competición europea.

Dembélé marca la diferencia

Los primeros compases han sido claramente a dirección del Barcelona, que ha asustado a los italianos con una doble intervención de Messi, que no ha conseguido perforar la portería rival. Cerca de Neto era Morata quien se desmarcaba en profundidad buscando recibir balones en largo de los blanquinegros y Dybala desequilibraba líneas con pocos movimientos.

Dembélé se antepone a la suplencia de Ansu Fati

La balanza ha caído en favor de los catalanes cuando Messi ha alzado la mirada y ha decidido cambiar el juego a la banda derecha para Dembélé que, sin pensárselo demasiado, ha disparado directamente a portería para hacer el primero, beneficiado de un rebote en la defensa italiana. En la siguiente jugada, Morata empataba el encuentro pero el VAR ha decidido anular la diana por manos del delantero dentro del área.

El Barcelona ha puesto una marcha más para intentar solventar las embestidas reiteradas de la Juventus. La combinación entre Messi y Griezmann dentro del área ha deparado un disparo milimétrico del capitán, que ha salido rozando los tres palos de la portería rival. Antes de la media hora, Morata ha vuelto a frustrarse ante portería cuando el colegiado ha anulado el gol del empate por posición antireglamentaria.

Araujo deja la defensa en 'KO' técnico

Los de Pirlo llenaban líneas en defensa por el centro, obligando a los de la Ciudad Condal a buscar desequilibrio por las bandas. Jordi Alba, por la izquierda, era el mejor aliado de Messi, aunque el catalán tampoco ha encontrado la puntería necesaria para hacer el segundo.

En un despeje cerca de la portería culé, Araujo se ha dejado caer al suelo doliéndose en la zona de los isquiotibiales y dejando a Koeman en blanco, que no disponía de más centrales. Sergio Busquets ha acortado el calentamiento, aunque la primera mitad no ha dado para más. Ya en la reanudación, el de Badía del Vallés ha entrado en el terreno de juego obligando a De Jong a retroceder metros y situarse junto a Lenglet.

Los catalanes seguían intentando agrandar la distancia en la electrónica, con varias ocasiones dentro del área de Griezmann y Dembélé junto al '10'. Lenglet ha forzado una falta lateral desde la banda derecha que ha dejado a Messi en el punto de mira, aunque no ha conseguido sentenciar el segundo de la noche.

Morata, 'hat-trick' de goles anulados

Cuando más felices se las pintabas los azulgranas, Cuadrado ha descolgado el balón en la banda izquierda para ponerla dentro del área para Morata que, tras confirmar al asistente, ha celebrado el empate de la Juventus. Tras la comprobación del VAR, el madrileño ha visto anulado por tercera vez su tanto ante Neto.

Pedri, la gran sorpresa del Barcelona

El Barça tenía clarísimo que quería llevarse los tres puntos del Juventus Stadium y Pedri, con elegancia y talento a raudales, ha sorprendido con una gran jugada individual que Dembélé no ha sido capaz de sentenciar ante portería. El canario se ha colgado el equipo a la espalda y ha arrancado sin freno con el objetivo claro: Szczesny, aunque el segundo empezaba a resistirse en exceso.

Con casi media hora por delante, Koeman ha sacudido el banquillo para dar entrada a Ansu Fati, buscando en él toda la artillería que Dembélé perdía en este segundo tiempo. Demiral se ha ganado una clara amonestación al tumbar a Messi en el césped cuando el argentino ya había superado a varios jugadores locales.

Victoria de mucho mérito

La poca fortuna de los catalanes ante portería empezaba a mimetizarse entre los jugadores y el ejemplo más claro ha sido Griezmann, que ha mandado a pocos milímetros de la portería, un gran pase de Busquets desde atrás. Pjanic se ha hecho el flanco claro de todas las faltas de la Juventus, hasta que Demiral ha visto la segunda amarilla y ha dejado a los de Pirlo con un hombre menos.

En los últimos minutos del tiempo reglamentario, el técnico azulgrana ha retirado del terreno de juego a Griezmann para dar entra a Junior, buscando así más solidez en defensa ante las llegadas de Cuadrado. Segundos después, Ansu Fati ha forzado el penal a favor del Barcelona que Messi ha transformado desde los once metros.

Tras la entrada de Braithwaite con descanso merecido para Pedri, el Barcelona ha firmado el 0-2 definitivo en Turín y la segunda victoria en UEFA Champions League, que sitúa a los azulgranas en la cabeza del Grupo G. En pocos días, el Dynamo de Kiev visitará el Camp Nou aunque, de mientras, los de Koeman deben centrarse en la Liga Santander, donde los puntos escasean en el casillero catalán.