El Sevilla FC no sólo sumó tres puntos ante el Rennes, sino que ha mantenido la portería a cero por segunda vez consecutiva en la UEFA Champions League. Si es verdad que el mayor problema de los de Lopetegui es el gol, todo lo contrario pasa con la defensa, la línea del juego más potente del escuadrón sevillista.

El punto más fuerte del equipo es su defensa y, sin dudarlo, su portero. Muestra de ello es el partido ante el Stade de Rennais, los hispalenses gozaron de hasta 23 ocasiones de gol aunque solo una entró, en cambio, su rival tuvo pocas ocasiones y ninguna consiguieron entrar en las redes rojiblancas. Un dato importante es que en los dos últimos partidos de LaLiga, los pupilos del técnico vasco no han conseguido ningún triunfo, cosechando derrotas por la mínima. Habría que retroceder hasta la Supercopa de Europa ante el Bayern de Múnich para recordar que el Sevilla encajó más de un gol, lo interesante es que el conjunto alemán lo hizo con prórroga incluida. 

En los cincos encuentro que llevan los hispalenses en LaLiga, ha recibido goles en cuatro de ellos pero solamente uno, y se han mantenido imbatido ante el Levante UD. Esto último han sabido aprovecharlo y prorrogarlo hasta la Liga de Campeones, consiguiendo un empate a cero ante los ‘blues’, el Chelsea y en noche del pasado miércoles ante el Stade de Rennais.

Sin duda alguna, el Sevilla FC, con la incorporación de Yassine Bounou, ha conseguido fortificar y perfilar las redes nervionenses. Con el meta marroquí los rojiblancos pueden estar tranquilos, ya que su gran calidad hacen de él un gran portero al que pocos equipos consiguen hacerle gol. Muestra de ello es los goles que ha recibido hasta el momento, siendo mínimos los concedidos.