El Real Madrid cumplimentó una actuación colectiva sobresaliente ante la SD Huesca (4-1) que le sirvió para regresar a la senda de la victoria en la capital española, después de cosechar derrotas estrepitosas ante el Cádiz CF y el Shakhtar Donetsk. En la misma línea y frente al equipo oscense, Sergio Ramos disputó su partido número 500 en la máxima categoría española, cifra que evidencia su buen hacer con el conjunto blanco, además de su regularidad y notable nivel a lo largo de toda su trayectoria como futbolista profesional. Pese a no ver puerta, el capitán del vigente campeón de LaLiga Santander completó una actuación sobresaliente, esta vez escoltado por Eder Militao. Asimismo, el central nacido en Camas dispone de una relevancia excelsa en los planes de Zinedine Zidane, contando con libertad total y absoluta para incorporarse al ataque si el juego así lo requiere. 

Sergio Ramos aterrizó en la disciplina del Real Madrid en 2005, portando la vitola de joven promesa llamada a ser importante a medio-largo plazo; no obstante, dispuso de un papel protagonista desde su aterrizaje, iniciando diversos encuentros como lateral diestro, demarcación en la que también cumplió con creces. Quince años después, el central andaluz se ha erigido como uno de los jugadores más importantes de la historia blanca, además de como uno de los más entonados artífices de los éxitos más recientes, entre los que destacan varios títulos de UEFA Champions League. Sobremanera, el brazalete de capitán emerge como la recompensa a tantos años de trabajo. 

Considerado como uno de los más resolutivos zagueros en la historia del Real Madrid, Sergio Ramos se ha reinventado  y, a su vez, se ha convertido en un defensor central con alma de delantero. A sus magníficos lanzamientos desde el punto de penalti, se le suman, ahora, unas brillantes y eficaces ejecuciones de faltas, aspecto que demostró el curso pasado ante el RCD Mallorca. A sus 34 años, el zaguero nacido en Camas se encuentra inmerso en una dinámica en la que únicamente tienen cabida noticias de índole positiva. Sus magníficas condiciones, acompañadas por una relevancia superlativa, hacen del internacional por España por un jugador capital en los esquemas del técnico francés del cuadro blanco.