Pocas horas quedan para que dé comienzo un partido que significa una verdadera final para el Real Valladolid. Este domingo a las 18:30, el Pucela recibe al Athletic Club en la que puede ser la última oportunidad para Sergio González si quiere mantener su puesto. Es la novena jornada de LaLiga y, en las ocho anteriores, su equipo aún no ha logrado ganar ningún partido. Son colistas de la Primera División española, y en esta liga no hay equipo con menos goles a favor.

Este viernes, el equipo ha preparado el partido en el mismo estadio José Zorrilla, y lo hizo ante la supervisión del presidente, Ronaldo Nazario. El técnico pudo contar con todos los integrantes de la primera plantilla, a excepción de Kiko Olivas, Javi Sánchez y Janko, lesionados. El último entrenamiento antes del partido será el día anterior, este sábado, a partir de las 11:00 horas en los Anexos.

El Athletic Club tampoco pasa por un buen momento, aunque viene de conseguir una importante victoria ante el Sevilla. El equipo vasco no está acertado de cara a puerta rival, y lleva seis goles a favor, solo uno más que el Real Valladolid. Como dato histórico, de 44 visitas al Pucela, el Athletic solo ha ganado nueve.

Esta temporada, como visitante, los de Gaizka Garitano han jugado cuatro partidos, marcando solo en uno de ellos, y perdiendo el resto. En cuanto a tiros, los rojiblancos llevan 64, 26 de ellos a puerta. El Real Valladolid lleva 22 a puerta de 54 disparos totales. En el ámbito disciplinario, el Athletic lleva 21 tarjetas amarillas, por solo 16 blanquivioletas. En cuanto a expulsiones, solo el Real Valladolid tiene una.

Los datos de pases acertados y posesión media también se decantan en favor de los vascos, con un 76% y un 57%, respectivamente. El Real Valladolid se acerca al porcentaje de acierto en el pase, con un 72%, y se queda más atrás en la posesión media, con un 43%.

Por último, el máximo goleador de los visitantes es Unai López, con dos tantos en cuatro remates, e Iñaki Williams suma ya dos asistencias. Estos son dos de los jugadores a los que la defensa pucelana más tendrá que echar el ojo, en un partido en el que dejar la portería a cero es una de las prioridades, si quieren levantar cabeza.