Después de la derrota ante el Barcelona por 5-2, los verdiblancos cayeron en picado en el Camp Nou, además, cabe destacar una mala noticia que se vivió durante el encuentro, siendo el protagonista Aissa Mandi, que fue expulsado en el minuto 60, quedando media hora de juego. Su acción provocó el segundo penalti que le pitaron a los locales; el primero de ellos lo lanzó Griezmann, que se topó con los guantes de Bravo, pero en esta ocasión fue lanzado por Leo Messi, quien no falló ante su ex compañero, subiendo al marcador el tercero del cuadro culé.

El jugador argelino asumió que lo echaran a la calle, mientras que el conjunto bético estaba jugando con un hombre menos. Mandi salió sin mucho problema del terreno de juego, aceptando que el equipo a partir de ese momento buscaría la heroica con diez como consecuencia de lo ocurrido. No cabe duda de que, tras la expulsión, el Betis sufrió una goleada. Los verdiblancos buscaban remar contra viento y marea, logrando meter un gol en desigualdad numérica, pero de nada sirvió en un encuentro que finalizó con 5-2.

Ante el Athletic de Bilbao habrá que hacer borrón y cuenta nueva, destacando que tienen dos semanas de 'descanso' por el parón de selecciones. Aunque esta breve desconexión no hace olvidar que Mandi se perderá el partido en San Mamés, donde habrá que buscar un sustituto para la zaga para afrontar la décima jornada de la competición liguera.

No cabe duda de que todo el equipo se dejará la piel para el siguiente choque ganarlo, aunque sea fuera de casa, cogiendo la fuerza y la confianza que perdieron ante el conjunto azulgrana este sábado en la novena jornada, en el Camp Nou. Este parón, al que se han ido perdiendo, se espera que les cause mejores sensaciones que el anterior, donde costó salir de una mala dinámica.