La inferioridad numérica condicionó el partido y limitó notablemente cualquier intento de remontada por parte de los béticos. Así hablaba Guido tras el encuentro: "El partido lo disputamos en el primer tiempo, pese a que ellos tienen grandes jugadores. Tuvieron 'chances' de marcar, pero nosotros también. Luego, con la expulsión, se hace complicado con uno menos... Nos está pasando en varios partidos. El despliegue físico se siente, sobre todo si no tenemos la pelota."

El Betis no le perdió la cara al encuentro a pesar de estar con diez futbolistas sobre el terreno de juego. Un Messi estelar y el peso de la cartulina roja a Mandi, hicieron imposible cualquier intento de remontada: "Tratamos de pelearlo e hicimos el 3-2, pero ellos mueven mucho y rápido la pelota, por lo que terminaron apareciendo en el área con mucha gente. Sentimos el hombre menos, sobre todo ante equipos con la calidad de los del Barcelona. Se hace muy cuesta arriba."

Un bache que no tiene porqué afectar a la continuidad del equipo. Los de Heliópolis dieron una imagen notable en el Camp Nou, y esa es la línea a seguir para que lleguen los puntos: "Hay que seguir trabajando para volver a sumar y que pasen lo menos posible estas cosas."

El resultado abultado no expresa la realidad de un encuentro mucho más disputado de lo que se refleja en el marcador. El partido tuvo muchas alternativas, y las ocasiones de las que gozaron ambos conjuntos pudieron decantar el partido para un lado o para otro. Finalmente, la pegada del Barcelona liderada por un gran Messi, privó a los chicos de Pellegrini de llevarse los tres puntos del feudo culé.

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