El Real Betis no supo aprovechar la oportunidad de colocarse quinto en la clasificación en el partido que le enfrentaba a un Athletic de Bilbao que llegaba en horas bajas, y con la continuidad de su entrenador pendiendo de un hilo. Los verdiblancos fueron el rival perfecto para un equipo que acusaba falta de gol, y que endosó un contundente cuatro a cero a los heliopolitanos. Los jugadores béticos no dieron muestra alguna de reacción en los noventa minutos que duró el encuentro.

Joaquín, que celebraba su partido 800 como jugador profesional, fue el encargado de comparecer ante los medios tras el duro encuentro de esta jornada. El capitán, con el gesto visiblemente contrariado y la mirada vidriosa, se mostraba dolido por la contundente derrota: "La derrota duele, sobre todo porque no hemos sido el equipo que hay que ser cuando se juega con el Athletic o contra cualquier equipo de Primera." Y es que desde el primer minuto el equipo dio muestras de no estar metido en el encuentro: "No hemos entrado bien en el partido. Hemos intentado reaccionar en la segunda parte, pero no hemos sido capaces. Hay que hacer autocrítica dura."

El portuense, además, se refirió a la fragilidad defensiva del equipo, especialmente fuera de casa y en los últimos encuentros, que contrasta con la imagen en los partidos en el Villamarín: "En casa somos un equipo que sale con confianza desde el primer minuto, que lo intenta, que va, que crea ocasiones, seguro atrás… y fuera no se puede recibir tantos goles."

Para el capitán verdiblanco ser "los máximos goleados de La Liga" es una losa importante a la hora de encarar los partidos "para ganar." Por ello, cargado de autocrítica, mandó un mensaje a la afición bética: "Por supuesto que entiendo el cabreo (de la afición), no es la primera vez que nos pasa. El año pasado fue duro, este año sabíamos que nos teníamos que exigir, que teníamos una plantilla para competir en cada partido. Hicimos un buen arranque de temporada, pero en estas últimas jornadas fuera de casa no estamos siendo un equipo agresivo, contundente, que dé esa seguridad para encarrilar bien los partidos. Esta claro que así no se puede", sentenciaba.