El cuadro verdiblanco caía derrotado ante el Eibar en la noche del lunes. La derrota no es la peor noticia para los aficionados béticos, que un año más ven como su equipo no tiene capacidad para competir de tú a tú con entidades que menos valor económico que el suyo. El Betis se condena nuevamente a la mediocridad, colocándose como equipo más goleado de las cinco grandes ligas. Sobre el encuentro habló ante los medios el técnico, Manuel Pellegrini.

El técnico verdiblanco, en primer lugar, alabó el juego de su rival, clasificándolo como un equipo "muy ordenado y con un fútbol muy agresivo". Todo lo contrario que los verdiblancos, que sufrieron en todos los aspectos del encuentro. En opinión del técnico, el Real Betis comenzó el choque "creando un par de ocasiones", pero el empezar a perder el balón hizo que los sevillanos perdieran la confianza en sí mismos. 

La situación verdiblanca, con cinco derrotas en los últimos seis encuentros, lleva a la preocupación. Y el técnico aseguró que el también está inquieto por ello: "Cuando uno no encuentra soluciones, se preocupa. Hemos hecho cambios y no han dado fruto, pero estamos unidos y más fuertes que nunca." Además, el Betis ya no es capaz de manejar el balón como lo hacía a comienzos de temporada, pero El Ingeniero asegura que trabajarán para cambiar la situación. 

La fragilidad defensiva del Betis es otro de los grandes lastres: "No podemos recibir tantos goles. 17 goles en seis partidos no pueden ser", decía Pellegrini. Sobre la actitud del equipo comenta que tienen "ganas de hacer las cosas bien", y asegura que es algo que no puede criticarse, pero sí reconoce que la plantilla puede dar mucho más de lo que se ha visto hasta ahora.

Otra de las grandes dudas sería la sustitución, o dimisión, ante la mala racha de resultados. "Para nada me he planteado dimitir", afirmaba seguro: "No me faltan ganas para revertir esta situación. Quiero que el equipo retome la confianza y los jugadores den ese rendimiento." Para terminar quiso mandar un mensaje a la afición, decepcionada con equipo y técnico: "Los aficionados deben saber que los jugadores están tratando de hacer las cosas bien", sentenciaba.