Desde su llegada al Real Betis el pasado verano, Manuel Pellegrini ha apostado por un fútbol de toque. La salida de balón desde el portero era una de las cosas a trabajar por los jugadores verdiblancos, que quisieron adaptarse el estilo de juego implantado por el técnico chileno. Pese a ello, las dificultades a la hora de jugar desde atrás estaba costando muchos puntos a los verdiblancos, que no acababan de sentirse cómodos en esta faceta. 

En el partido ante Osasuna todo cambió. Pellegrini dejó atras el 'jogo bonito' y apostó por balones largos y un equipo más ordenado atrás. El estado del terreno de juego también ayudó a que este cambio se produjese pero la apuesta del técnico fue clara: quería a un equipo sólido en defensa. Para ello, el delantero elegido, en este caso Loren, realizada un brutal desgaste en el juego de espaldas teniendo que arrastrar a los centrales. Así, el Betis asumía menos riesgos cerca de la portería y si conseguía atraer a su rival, tendría más facilidades en la punta de ataque. 

Además, la dupla Guardado-Guido sirvieron para dar al cuadro verdiblanco un equilibrio que permitía a Carvalho contener también a la defensa y ofrecía a Fekir libertad para realizar su juego de aproximación a la portería rival. 

Este estilo favoreció al los verdiblancos en el Sadar, donde consiguieron su quinta victoria de la temporada. El Betis apostó fuerte y ganó a la contra, lo que le permitió dar un salto en la clasificación.

Los goles llegaron de la misma forma. El primero de ellos nace de una acción de ataque rojilla. Víctor Ruiz, muy atento, recoge el rechace de Emerson ante el centro desde la derecha de Osasuna. Tras ello ve solo a Borja Iglesias en el círculo central y libera el balón. 'El Panda', con un movimiento de delantero, cede el balón a Ruibal que abre a Fekir y se desmarca al primer palo, dejando libre el segundo a Borja. Así, una vez dentro del área, Ruibal cede al '9' para poner el primero en el marcador. 

El segundo tanto llegó con los 90 minutos reglamentarios ya cumplidos. El Betis supo descolocar a Osasuna y un jovencísimo Juan Miranda quiso aprovechar su oportunidad. Fekir filtró un balón en profundidad a Joaquín y el '33' bético trazó una diagonal perfecta, haciendo que Nacho Vidal perdiese la marca y permitiéndole quedar por delante del defensa para rematar a puerta. 

El Betis volvía a ganar y conseguía hacerlo de una forma diferente a las anteriores, dejando claro que el fútbol de toque no es la única oportunidad.