Parece que el Barcelona sigue naufragando, perdido y sin rumbo esta temporada. Tras un verano de escándalos y especulaciones, la era Koeman no ha arrancado con buen pie para los intereses del barcelonismo que, a mes de Diciembre, podría tener muy complicados todos los títulos.

La situación en Liga Santander es prácticamente insostenible mientras que en Champions League, donde el equipo había conseguido un pleno de victorias, podría haberse roto este martes.

La derrota por 0-3 en el Camp Nou ante la Juventus ha dejado muy mala imagen del conjunto catalán, que se complica el sorteo de octavos de final. Tras el partido Griezmann opinaba ante la prensa: "No hemos estado donde tocaba. En la primera parte nos han pasado por encima. Es una falta de todo: de ganas, de actitud, de querer correr, defender, atacar... todo estaba mal", explicaba el francés.

Griezmann delega la responsabilidad en el vestuario

Una mala noche ante la Juventus, que no desaprovechó la oportunidad de conseguir su objetivo: "En la segunda parte ellos ya tenían ventaja de 3 goles y era muy difícil", contestaba un crítico Griezmann.

Preguntado sobre qué había pasado y qué está ocurriendo con el equipo, al francés le faltaban argumentos para excusar al vestuario: "Ha sido un mal día, un mal partido, poco más puedo decir", respondía para añadir: "Vamos a intentar buscar excusas de un lado a otro y no, la única manera es apartarlo todo y trabajar".

Por último, aseguró que la responsabilidad es del vestuario: "¿De quién va a ser la culpa si nosotros somos los que jugamos? Somos los jugadores. Hay que trabajarlo y mejorar, querer trabajar y jugar" y que todo pasa para recomponerse y mantener vivas las esperanzas de cara a finales de temporada: "Tenemos que ganar el domingo, para que no se nos complique aún más. Hoy hemos dado una imagen muy fea de nosotros para la afición", sentenciaba Griezmann.