Con el 2021 asomando ya la cabeza, el Granada afronta su último duelo de un año tan histórico como raro y diferente. La próxima parada del conjunto de Diego Martínez antes de comenzar el carrusel de partidos que esperan en enero es el Valencia, un rival que no se le ha dado especialmente bien al Granada desde su vuelta a la élite en 2011.

Este miércoles le toca recibir a un Valencia en una gran crisis institucional que se sostiene con cantera y jugadores que sienten el escudo a pesar de la delicadísima situación. Un conjunto que al Granada CF no se le ha dado demasiado bien a lo largo de su historia, pues en las 56 ocasiones en las que se han enfrentado ambos conjuntos, el Granada solo ha salido victorioso en 13 de ellas, siendo 33 las veces en las que el conjunto "che" ha conseguido la victoria, quedando en 10 ocasiones en tablas. Justamente el último encuentro entre andaluces y valencianos se saldó con un empate a 2-2 en la temporada pasada, donde ambos luchaban por un puesto de Europa League que, finalmente, se acabó llevando el conjunto de la ciudad de la Alhambra. También en la temporada pasada se vivió la última victoria de un equipo frente a otro, si bien el Valencia consiguió vencer en Mestalla al Granada por 2-0 en el partido de la primera vuelta en Liga, el Granada conseguiría una de sus victorias más históricas ante los valencianos en cuartos de final de la Copa del Rey, venciendo por 2-1 con doblete de un viejo conocido del valencianismo, Roberto Soldado.

Para este encuentro, el Granada llega con dos bajas muy significativas, y es que Luis Milla será baja por COVID-19, uniéndose a la baja de Ángel Montoro por lesión, lo que deja muy mermado de creación al centro del campo nazarí, un verdadero quebradero de cabeza para el míster gallego del Granada, que ya ha sufrido la falta de creación a lo largo de esta temporada debido al altísimo número de partidos que ha disputado el conjunto nazarí desde septiembre.