La perla japonesa del Real Madrid ha sido cedido al conjunto azulón en este periodo de invierno para reforzar el ataque del Getafe, y le ha faltado tiempo a Bordalás para contar con él en el equipo, ya que debutó en el último partido del Getafe en el Martínez Valero frente al Elche, donde ganaron por 1-3, tres puntos importantísimo que le sirve para alejarse de los puestos de descensos.
Entró en el minuto 64 por el centrocampista serbio, Maksimovic, cuando el encuentro se encontraba empatado a uno y el conjunto ilicitano con un jugador menos, tras la expulsión a Marcone. Con su entrada en el terreno de juego, el cuadro madrileño mejoró en sus líneas ofensivas gracias a sus pases para romper las líneas del Elche y por su habilidad a la hora de zafarse de sus adversarios. Fue una bomba de oxígeno para el geta en el último tramo del partido, ya que lo único que le faltaba al equipo era esa chispa y esa verticalidad que ofreció el joven japonés para poder ganar el encuentro que se le puso cuesta arriba por el tempranero gol del cuadro valenciano.
¿Dónde se posicionó?
Su primera colocación fue un poco más adelante de Arambarri y Aleñá, como una especie de media punta, pero que durante los minutos se fue tirando para la banda derecha, posición en la que jugaba en el Villarreal de Emery. Fue clave en las dos jugadas de los goles, por un lado en el 1-2 fue el responsable de chutar a la portería de Édgar, en la que éste consiguió parar con la mala fortuna que el rebote lo cogiera Mata para anotar. Por otro lado, en el 1-3 fue el jugador que centró desde la banda derecha para que Verdú derribara a Ángel, para que no rematara, pero hizo penalti, que minutos más tarde, lo convirtió en gol el delantero canario; Con este fichaje el juego ofensivo del Getafe va a aumentar bastante, como se pudo ver el lunes, y como ha señalado su técnico en la rueda de prensa posterior al encuentro: "Hemos hablado con Kubo hoy y le he explicado lo que creía que podía aportar si entraba al campo. Lo ha hecho francamente bien".