El Barcelona Femenino vuelve a casa con las manos vacías tras caer en las semifinales ante el Atlético de Madrid, pese a que se ha tenido que llegar hasta la tanda de penaltis tras el 1-1 en el marcador.

Alexia Putellas conseguía el empate a pocos segundos de finalizar el tiempo reglamentario, pero la falta de puntería desde los once metros ha acabado sentenciando al equipo azulgrana, que regresará a casa sin la Supercopa de España, pese a partir como favoritas. Este próximo sábado Levante y Atlético de Madrid se disputarán el primer título de la temporada, mientras las culés se centran ya en los próximos compromisos oficiales y regresan a la Ciudad Condal con las manos vacías.

Tras el encuentro, Patri Guijarro atendía a la prensa para valorar el juego realizado: "En la segunda parte nos han dificultado un poco más la salida, pero creo que hemos tenido el balón y, a pesar de los días que hemos pasado, hemos sabido sufrir y competir", explicaba desde Los Juegos del Mediterráneo.

"Es una pena el resultado"

Mucho han generado las catalanas, pero parecía que la esférica no quería entrar en la portería colchonero, algo que han acusado hasta el último momento: "Al final hay que meter el balón. Esto nos hará aprender y hay que seguir, asimilarlo, y aprender de esto", confesaba la azulgrana.

Aun así, el equipo se marcha a casa con la convicción del trabajo bien hecho y de haber demostrado que el fútbol femenino dará mucho que hablar en los próximos años: "Creo que hemos confiado hasta el final. Hemos sido un equipo fuerte que tenía mente fría, no precipitarnos".

Por último, se mostraba descontenta con el resultado, pero convencida de sus compañeras: "Hemos confiado en que llegaría el gol. Es una pena el resultado, pero nos vamos con confianza de lo que hemos demostrado como equipo", sentenciaba desde la sala de prensa en Almería.