Zinedine Zidane está  agotando su crédito para seguir al frente del Real Madrid. La eliminación de La Copa del Rey en manos de Alcoyano, un equipo de la Segunda División B fue la gota que  terminó de llenar el vaso de la discordia.

El técnico francés llegó como entrenador del Real Madrid por primera vez en el 2016 hasta el 2018, luego del sin sabor que había dejado Rafa Benítez dirigiendo al equipo. Zidane en su llegada ganó 3 Champions League (2015-16, 2016-17, 2017-18), dos mundiales de clubes (2016-2017), dos Supercopas de Europa (2016-2017), una liga (2016-17) y una Supercopa de España (2017-18) contaba con una plantilla de gran calidad y con revulsivos que respondían a sus necesidades técnicas, Zizou siempre tuvo y tiene el apoyo de la junta directiva del club, por ser uno de los jugadores referentes  del Real Madrid, cualquier decisión que el tomara sería bien vista. A Zidane la afición siempre lo apoyó por seguirle sumando glorias al equipo más importante del mundo, en su primera etapa como entrenador, el pedestal en el que se le tenía lo merecía.

El 31 de mayo de 2018, Zinedine decide dar un paso al costado y no seguir dirigiendo más al equipo porque no se le estaba dando los resultados, dijo él ese día: “El equipo necesita un cambio para seguir ganando" sorprendió a Florentino y en todos dejó una incertidumbre de lo que sería el futuro del equipo después de él y el precedente que había marcado. Como es conocido el Real Madrid pasó de Zidane a contratar a Julian Lopetegui en el 2018 quien luego fue destituido del cargo, después llegó Santiago Solari del 2018 al 2019. El equipo atravesaba por un muy mal momento, Solari sentó a jugadores como Marcelo e Isco y tomó decisiones poco favorables para el equipo que no daba resultados, razón por la cual el Real Madrid vuelve a llamar a Zinedine Zidane para salvar el barco, desde el 2019 a la actualidad el galáctico volvió a tomar las riendas del club, en su regreso ha conseguido una liga (2019-20) y una Supercopa de España (2019-20).

Zidane volvió a dirigir el barco, enderezó el camino, volvió a llevar al equipo a ganar títulos y demostró que tenía las capacidades suficientes para asumir de nuevo el reto. Sin embargo, como dice el dicho “uno siempre vuelve a los lugares donde fue feliz”, pero muchas veces ese volver se puede convertir en una relación que comienza a deteriorarse en la que queda el recuerdo de lo que jamás volverá a ser y que por más de que se trate de pegar piezas, se volverá a romper porque ya eso que los unía dejó de funcionar y necesita de otro moldeador.

Hoy la pregunta que más ronda entre la afición y los medios es ¿Debe Zidane dar un paso al costado? Seguramente muchos tendrán muy clara la respuesta, como yo. Pero antes de darla a conocer se debe hablar del porqué el Real Madrid llegó hasta esta situación que deja más preocupación que tranquilidad. El Real Madrid es un grande a nivel mundial, siempre tiene que estar en la cima peleando todo lo que juega, con jugadores capaces de afrontar el reto que esto concierne, dicho esto, el equipo ha venido sufriendo un desgaste a nivel táctico, a nivel físico y mental, ya no hay entendimiento, ni una idea de juego clara, porque ya todos saben a qué juega el Real Madrid, saben jugar con los puntos débiles y Zidane que siempre ha tenido la autonomía de elegir sobre la plantilla, no es consciente que por ejemplo, jugadores como Marcelo que su nivel ha ido de baja ya no puede ir de titular, jugadores intermitentes como Vázquez que pueden tener un partido extraordinario, pero al otro tienen el peor día no pueden ser una solución, en cada rueda de prensa habla de dar oportunidad a todos, pero realmente no es así, porque han sido tantos bajonazos que los jugadores no están al 100% de darlo todo por más que lo deseen, porque ya no lo entienden y solo hacen un desgaste mental que los pone en un nivel de ansiedad al enfrentar un nuevo juego. Zidane olvidó que para ganar hay que renovar, volver a reconstruir cada temporada, que solo jueguen los que realmente estén al 100% de darlo todo por la camiseta y no casarse con la terquedad.

A Zidane, por supuesto siempre se le guardará respeto y se le agradecerá su aporte al club, se convirtió en uno de los técnicos más ganadores, pero es hora de dar un paso al costado, los ciclos terminan y aunque quedan dos copas por disputar esta temporada, será difícil obtener algo si salir a decir que perder con un equipo de tercera división “son cosas que pasan” él y la plantilla tienen que ser autocríticos y ver que el panorama no pinta bien, han ido retrasando una realidad que de a pocos se sale de las manos y esa realidad es que el Real Madrid necesita volver a ser un equipo competitivo, el Real Madrid necesita contrataciones de calidad, y lo más importante necesita volver a recuperar esa fuerza mental que los hacía casi invencibles. El Real Madrid necesita recordar las palabras de Santiago Bernabéu “La camiseta de Real Madrid es blanca.  Se puede manchar de barro, sudor y hasta sangre, pero jamás de vergüenza”.