Los resultados siguen sin llegar en el conjunto blanquivioleta. A pesar de realizar una buena actuación, el Real Valladolid pierde por la mínima (0-1) y no encuentra recompensa en el esfuerzo dedicado frente a uno de los candidatos a ganar el campeonato liguero, el Real Madrid. No obstante, el partido planteado por Sergio González puede ser señal de un cambio de dinámica en las filas pucelanas.
Durante la primera parte, el equipo vallisoletano fue capaz de consolidarse en el campo y crear las ocasiones más peligrosas. Janko tuvo la oportunidad más clara para los locales, tras un remate dentro del área que finalmente despejó Courtois. Los locales llevaron a cabo una presión constante en los 45 minutos iniciales, con el fin de robar arriba y armar rápidamente la contra, plan que funcionó e hizo recular al conjunto blanco en numerosas situaciones. Consciente de esto, Zidane encontró la solución en Casemiro, al que posicionó como cerrojo entre los centrales y logró minimizar los riesgos para llegar en tablas al descanso.
El Real Valladolid siguió con las mismas instrucciones desde el comienzo de la segunda mitad y los visitantes respondieron con el dominio de la pelota. Aunque los pucelanos pusieron el máximo trabajo de su parte, la superioridad del Real Madrid en todas las fases del juego hizo muy difícil la llegada a portería rival. Fue en una jugada a balón parado cuando Casemiro, el mismo hombre que había anulado las ofensivas blanquivioletas, adelantó a la escuadra madrileña con un remate de cabeza. Desde ese momento, los blancos supieron dirigir el rumbo del partido y alejar el peligro de su área. Los tres puntos fueron para la capital y el conjunto pucelano no obtuvo la recompensa acorde con el rendimiento ofrecido en el choque.
Con este resultado, el equipo dirigido por Sergio González ocupa la penúltima posición y cada vez más lejos de la salvación. El siguiente encuentro enfrentará al Real Valladolid y al Celta de Vigo el domingo 28 de febrero a partir de las 14.00 horas en Balaídos.