Tras una espera de dos meses, regresaron las noches mágicas de la UEFA Champions League para el Real Madrid, en un duelo inédito para los 'Merengues', ya que nunca se habían enfrentado con Atalanta por un duelo oficial. Con cuatro triunfos al hilo en La Liga, el Madrid arribaba a este choque con la ilusión a cuestas de volver a alzar la 'Orejona', competencia que le ha sonreído plenamente en los últimos años.

Sin embargo, enfrente estaba uno de los equipos sensación de las recientes temporadas, el Atalanta de Gian Piero Gasperini, que logró clasificar nuevamente a la fase eliminatoria de la UEFA Champions League tras acabar segundo del Grupo D, el cual integró junto al Liverpool, Ajax y Midtjylland.

Zinedine Zidane recurrió a su ya clásico 4-3-3 con los nombres que pudo entre la enorme cantidad de lesionados que ha sufrido la plantilla del Real Madrid. En el fondo, la dupla central estuvo integrada por Nacho Fernández y Raphael Varane, mientras que los laterales fueron Ferland Mendy y Lucas Vázquez.

En el mediocampo, el ya famoso tridente Kroos - Casemiro - Modric, buscaría darle estabilidad al Madrid y asistir a Vinicius, Marco Asensio y un Isco Alarcón ubicado en el centro del ataque pero sin ser una referencia clara, intentando imitar un poco el aporte de Benzema al equipo.

El juego comenzó con mucho estudio por parte de ambos, con los 'Merengues' buscando contragolpear rápidamente, mientras que el Atalanta esperaba con su receta, moviendo bien el balón y saliendo con transiciones rápidas a las posiciones ofensivas donde esperaban Duván Zapata y Luis Muriel.

Nacho Fernández firmó un sólido partido en defensa | Foto: UEFA Champions League
Nacho Fernández firmó un sólido partido en defensa | Foto: UEFA Champions League

Los primeros minutos del partido se desarrollaban así, con algunas tibias aproximaciones por parte de ambos equipos, pero nada demasiado peligroso para cualquiera de los porteros. Sin embargo, pasado el primer cuarto de hora, el árbitro alemán Tobias Stieler no dudó y expulsó con roja directa a Remo Freuler por una infracción contra Ferland Mendy.

Tras una buena combinación por el costado izquierdo, el francés se marchaba solo para enfrentarse mano a mano con el portero rival, pero Freuler lo derribó en la puerta del área y el colegiado interpretó que era infracción de último hombre, por lo que envió al mediocampista directamente a las duchas.

Con la diferencia de un hombre, el partido comenzó a abrirse un poco y se pudo ver un poco más de acción cerca de cada área, sin tanta fricción y lucha en el mediocampo. Ante este desbalance, y para recuperar el equilibrio, Gasperini decidió quitar a Duván Zapata, con solo media hora de partido, y reemplazarlo por Mario Pasalic, dejando al delantero colombiano visiblemente molesto.

Los minutos pasaron, con un interesante trabajo de Isco intentando arrastrar la marca de los centrales del Atalanta y generar espacios para sus compañeros, pero ni Vinicius ni Asensio estuvieron finos en los metros finales. El telón de la primera mitad bajó y ambos equipos se marcharon al descanso con el empate a cero en el marcador.

Ya con el complemento en marcha, el Real Madrid tuvo en los pies de Modric la jugada más clara hasta ese momento, con un remate que, previo desvío, se marchó rozando el poste derecho. Con sólo un delantero, el Atalanta no pudo recurrir a su habitual presión alta, esa que tanto acostumbra en la Serie A y que le ha dado buenos resultados. 

Isco intentó suplir la ausencia de Benzema | Foto: Real Madrid
Isco intentó suplir la ausencia de Benzema | Foto: Real Madrid

En cambio, los de Bérgamo tuvieron que cuidarse un poco y eso le dio espacio al Real Madrid para salir con otro ímpetu en el segundo tiempo. Los minutos pasaban y pasaban y todo hacía entender que, más se acercaba el final, más cómodo se sentía el Atalanta con el empate como local, mientras que el Madrid no lograba encontrar los caminos para ese siempre bendito gol de visitante.

Mucho más ambicioso que su rival, los 'Merengues' se establecieron definitivamente en el campo del equipo italiano durante los últimos minutos del complemento. Así transcurría todo hasta que, a solo cinco minutos de cumplirse el tiempo reglamentario, Mendy frotó la lámpara y, desde la puerta del área, envió el balón a dormir contra el poste izquierdo de Pierluigi Gollini, abriendo el marcador.

Poco ocurrió sobre el final y el árbitro decretó el final, con triunfo para el Real Madrid en el primer duelo oficial entre los madrileños y el Atalanta, gracias al auténtico golazo de Ferland Mendy. La revancha tendrá lugar el próximo 16 de marzo, en el Alfredo Di Stéfano.