Lo primero de todo, darte las gracias por prestarte a esta entrevista. Lo segundo, ¿cómo estás?

La verdad es que no estamos contentos por cómo está dándose la situación. En lo personal, pues en los últimos partidos el míster está prefiriendo a Héctor. Pero bueno, yo sigo bien y trabajado para volver al once. Por lo demás, en lo que no respecta al fútbol, todo bien.

 

¿Cómo está el ánimo del equipo tras la dura derrota en Ferrol?

Nos dejó bastante tocados. Teníamos la esperanza que después de lograr esos tres puntos ante el Guijuelo de haber roto la mala racha y ganar varios partidos consecutivos. No pudo ser y además creo que el equipo se vio superado en varios momentos del partido y por eso acabamos tocados. Pero bueno, esta semana nos ha servido para limpiar mejor las cabezas y trabajar duro para ganar al Pontevedra.

 

¿Qué paso en la segunda mitad en A Malalta? Porque daba la sensación de que el Dépor, si jugar una gran primera mitad, estaba siendo superior al Racing.

Los primeros 15 minutos fuero para ellos, pero a partir de ahí tuvimos ocasiones para adelantarnos. La de Uche en un córner, la de Rayco que saca un defensa…pudimos adelantarnos. La segunda mitad comienza con su gol y sí que nos tocó bastante. Fueron superiores, pero aun así tuvimos esa de Claudio al final para, por lo menos, empatar y sacar un punto. Creo que aunque la segunda mitad no fue buena, pudimos sacar perfectamente un empate.

 

¿Hasta qué punto es positivo este parón? Porque claro, tenéis más tiempo para trabajar, corregir errores y limpiar cabezas, pero también que haya 15 días de margen puede alimentar la presión, la angustia…

No, yo creo que nos está viniendo bien. Este fin de semana, por ejemplo, para despejar un poco la cabeza en casa. En lo que respecta a los entrenamientos, nos sirve para seguir trabajando con el míster, que aunque lleva 6 partidos, no es lo mismo que venga a mitad de temporada que al inicio. Siempre viene bien tener estos días para trabajar más aspectos en los que necesitamos mejorar.

 

Quiero preguntarte por unas palabras de tu compañero, Héctor Hernández, esta semana. Decía que os ha costado mentalizaros de que estáis jugando en Segunda B. Que muchos jugadores venían al Dépor pensando ya en jugar los play off y que al final al equipo le ha faltado adaptarse a la exigencia del día a día en esta categoría.

Quizás el inicio de temporada donde lográbamos victorias pero no éramos superiores al rival nos engañó un poco y nos hizo pensar que estábamos haciendo las cosas mejor de lo que en realidad eran. A los hechos me remito, no estamos dando la talla.

 

¿Crees que todo lo que supuso el ‘Caso Fuenlabrada’ os ha afectado en exceso? Es evidente que la planificación se vio afectada y quizás la mente de los futbolistas también. Es un hecho que, de los 4 equipos descendidos de Segunda, Numancia y Dépor, los dos a los que el ‘Fuenlagate’ les afectó de una manera más directa, son los equipos que peor están rindiendo.

Está claro que eso influye. No tanto en nuestras cabezas, pero sí en la confección de la plantilla. Estuvimos entrenando con jugadores que pensaban que iban a quedarse y al final no fue así y los que llegaron lo hicieron un poco a destiempo. No es culpa de la dirección deportiva, claro, yo creo que es más culpa del tiempo que tardó en emitirse un dictamen definitivo.

 

No llevas ni dos temporadas enteras en A Coruña, sin embargo ya has trabajado con 4 entrenadores distintos y has convivido con 3 directivas. ¿Así, es más complicado para el futbolista?

No es algo agradable y no dota de estabilidad al club. Cuando las cosas están claras y todos reman en la misma dirección, las cosas van mejor. Si hay estabilidad en el club, el Dépor irá para arriba.

 

Sobre el último cambio en el banquillo quiero preguntarte. Con datos en la mano, tú eras uno de los fijos para Fernando Vázquez. ¿Cómo viviste su cese? ¿Crees ese cese, con el equipo 2º y con solo dos derrotas, le pudo trasladar al equipo una sensación de urgencia y máxima exigencia?

Fue una decisión del club en la que los jugadores no podemos entrar. Para el vestuario y para mí personalmente fue algo difícil. Llevábamos tiempo trabajando con él, es un buen entrenador, un buen tipo y siempre es duro ver como echan a alguien. Sobre tu segunda pregunta, es verdad que se estaban sacando puntos, pero en el momento del cese estábamos metidos en una mala racha y quizás eso empujó al club a tomar esa decisión.

 

Con Rubén de la Barrera, el equipo ha mejorado en ciertos aspectos. Sois un poco más dominantes, presionáis más arriba, llegáis más al área rival. Sin embargo, los resultados no llegan y son todavía peores. ¿Por qué?

Uno de los motivos que responden a la pregunta anterior tiene que ver con eso. Desde el inicio de temporada las sensaciones no eran buenas y el Dépor, en esta categoría tiene que dominar, ir arriba y ser superiores al rival. Eso con Rubén lo hemos mejorado, pero es cierto que tanto ahora como antes nos está faltando llegada al área. Tenemos un serio problema con el gol que nos está haciendo mucho daño.

 

Hablando ya en clave más global, es evidente que vosotros estáis lejos del objetivo, pero también lo están el Fabril y el Dépor Abanca. ¿Puede ser que en Abegondo terminen contagiándose las malas sensaciones o esto responde a un problema estructural del club?

Esto puede ser casualidad, pero creo que tiene cierta parte de lo que hemos hablado antes sobre la estabilidad, el proyecto, etc. Todo eso, hace que las cosas al final crezcan y vayan hacia adelante. Si no es así, todo cuesta mucho más.

 

El bloqueo mental que sufrís como equipo es evidente. La temporada pasada, también pasasteis por una dinámica similar. El otro día, Borja Galán comentaba en una entrevista para El Desmarque que no se está trabajando específicamente con psicólogos este tipo de situaciones, que tratáis de solucionarlo en el vestuario y con el trabajo con el cuerpo técnico. ¿Crees que tener un psicólogo o un coach es algo necesario actualmente en el fútbol?

Bueno, es verdad que puede ayudar, pero yo no creo que sea una solución mágica. El año pasado teníamos psicólogo y las cosas acabaron como acabaron. Yo en el pasado, en el Valencia, tuve un psicólogo y me vino muy bien. Yo creo que depende mucho de cada caso y cada jugador, es una herramienta más. El club entiende que no es necesario y no creo que los problemas que tenemos sean por eso.

 

Por último, te pediría que dejases un mensaje para la afición.

Que sigan creyendo, que no nos dejen de lado, que sigan como han estado a lo largo de toda la temporada. Aunque no estamos dando la talla, todavía quedan tres finales y los necesitamos a todos.