"No vamos a descubrir ahora a Álex Bergantiños". El jugador que lleva el brazalete de capitán del equipo desde hace varios años ha demostrado que siempre está cuando más se le necesita y que siempre cumplirá, con nota, el papel que se le pida. 

Tras varios partidos sin aparecer en el once, Álex volvía a la titularidad el pasado fin de semana ante el Pontevedra para desempeñar una función que, hasta ahora, no habría probado Rubén de la Barrera. El intercambio constante de posición de Álex sobre el verde entre central y centrocampista, volvió a dejar claro que el coruñés está dotado de una gran capacidad para hacer los movimientos más inteligentes según le convenga al equipo, lo que viene siendo, una inteligencia futbolística pese a no hacer tanto ruido como marcar un gol.

La vital tarea del jugador era tratar de frenar esos contragolpes que había recibido el equipo en los últimos encuentros, como ganar, en la medida de la posible, la mayor cantidad de segundos balones en la zona central del terreno de juego; algo que logró a la perfección.

El técnico deportivista reconoció en la rueda de prensa posterior el gran trabajo que había hecho Álex esa misma tarde. "No voy a descubrir a Álex, participe o no participe, y eso ha sido así siempre. Álex posicionalmente es muy bueno, cose al equipo, es importante tanto defendiendo con línea adelantada como atrasada."

Lo que parece claro, hasta el momento, es que Álex vuelve a estar llamado, una vez más, a tener un papel fundamental de cara a final de esta primera fase en un Dépor que vuelve a empezar a cubrirse las espaladas de nuevo antes de atacar. El partido del próximo domingo en Barreiro tiene una importancia vital para lo que resta de temporada y todo hace indicar que el capitán estará presente tras el ensayo de este viernes que preparó el entrenador deportivista.