El Betis se fue vacio del Ramón Sánchez Pizjuán, tras no saber reaccionar 0 a 1 de En-Nesyri.

Los de Pellegrini, pese al resultado no fueron para nada inferiores ante un Sevilla, que la única ocasión clara que tuvo fue debido a un error del propio Betis. Desde entonces, el Sevilla supo defender y en el Betis aparecía un nombre claro, el de Nabil Fekir.

Ante el pequeño paso atrás en el nivel de Sergio Canales, el francés ha dado un paso al frente y ha querido echarse el equipo a la espalda en todo momento.

Nabil no se cansó en ningún momento de intentarlo. Si bien, se ha hablado en otras ocasiones de la dejadez del francés en algunas ocasiones, la del partido contra el Sevilla no iba a ser una de esas.

Fekir cogió galones y, cuando más atascado estaba el equipo, aparecía el francés en escena para asumir las responsabilidades e intentar sorprender con alguna individualidad. Si alguien no sabía que hacer con el balón, balón a Nabil y que él inventara.

Pese a ser duda en últimos partidos por sus molestias musculares, el francés nunca ha dejado de ser indiscutible en el once de Pellegrini. Se le ve totalmente involucrado por conseguir el objetivo y  quiere jugar, a toda costa, Europa con el Betis el año que viene.

Si como bien, hemos dicho antes, el la temporada pasada, se le pedía que se echara más el equipo a la espalda, eso es lo que hace ahora el francés. Es por todos conocido la calidad y capacidad técnica del ex del Lyon, pero es que parece haber encontrado su rol perfecto dentro del equipo.

El francés se entiende a las mil maravillas con Sergio Canales y se hacen mejores mutuamente. El día que uno falla, o está un poco por debajo de su nivel, el otro da un paso al frente. Y así ha sido hoy. Canales ha estado bastante flojo y Fekir no ha tenido problema en asumir galones y dar un paso al frente.

 

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