Celta y Real Madrid se veían las caras en el choque correspondiente a la vigesimoctava jornada de Liga. El conjunto local buscaba sorprender al único equipo español vivo en la Liga de Campeones para seguir soñando con alcanzar puestos europeos. Por su parte, el cuadro blanco no se podía permitir fallar si quería mantener sus opciones de proclamarse campeón de Liga.

Duelo entre Santi Mina y Lucas Vázquez | Imagen: LaLiga
Duelo entre Santi Mina y Lucas Vázquez | Imagen: LaLiga

Dominio merengue

El Real Madrid empezó el partido de la misma manera que acabó el de Champions contra la Atalanta, con el modo competitivo activado. Los de Zidane ejercían una gran presión adelantada para contrarrestar la salida de balón del Celta, que no encontraba ninguna vía de pase clara para plantarse en campo contrario. 

El Celta se veía ahogado por la presión del Real Madrid

Pasados los primeros 15 minutos de angustia, los de Coudet empezaron a mover el balón de lado a lado y, de esta manera, cruzaban la divisoria para poner en apuros a los merengues. Sin embargo, no acababan de concretar en el último pase y Courtois se convertía en un mero espectador del encuentro.

Justo cuando se empezaba a animar el Celta, llegó el gol del Madrid. En el minuto 20, Toni Kroos se deshacía de la marca de Brais Méndez en la frontal y asistía con un gran pase entre líneas a Karim Benzema. El francés, que se mueve en el área como pez en el agua, controlaba y se giraba a la perfección para colocarla lejos del alcance de Iván Villar.

Benzema marca el 0-2 de disparo cruzado con la zurda | Imagen: Real Madrid
Benzema marca el 0-2 de disparo cruzado con la zurda | Imagen: Real Madrid

Déjà vú

Diez minutos después, ocurría lo que Eduardo ‘Chacho’ Coudet decía en la previa que quería evitar: los errores en salida de balón, justo lo que mató al equipo en el choque de la primera vuelta. Se produjo el déjà vú. Murillo entregaba una pelota comprometida a Renato Tapia en la corona del área propia. 

Renato Tapia jugó con molestias gran parte del partido

El peruano, incapaz de darse la vuelta, perdía el esférico ante la presión de Toni Kroos. De nuevo aparecía el alemán para dejar en bandeja de gol a Benzema. El '8' madridista emulaba así la asistencia de Luka Modrić el pasado miércoles frente a la Atalanta. El ariete galo, al igual que el otro día, no fallaba y confirmaba su dulce momento de cara a gol con un doblete a la media hora de encuentro.

Santi Mina cabecea el balón colgado del 1-2 | Imagen: LaLiga
Santi Mina cabecea el balón colgado del 1-2 | Imagen: LaLiga

El partido parecía haber muerto y ya se vislumbraba la goleada de los vikingos ante un Celta sin pulso. No obstante, corría el minuto 40 de partido cuando Santi Mina colocaba el 1-2 en el luminoso en una jugada totalmente aislada. Denis Suárez tocó con música una falta que el ‘22’ celeste lograba cabecear de forma perfecta y libre de marca.

Lavado de cara

El Celta saltó al campo más agresivo y valiente en la segunda mitad, yendo a buscar muy arriba al rival. El control del partido pasó a ser del elenco vigués gracias a la figura de un Denis Suárez generoso en el esfuerzo y clarividente en la distribución del juego. Eso invitaba al Real Madrid a buscar algún contraataque para matar el encuentro aprovechando la velocidad al espacio de Vinícius Jr.

Denis Suárez conduce el balón mientras es perseguido por Fede Valverde | Imagen: LaLiga
Denis Suárez conduce el balón mientras es perseguido por Fede Valverde | Imagen: LaLiga

Tuvo ocasiones claras el cuadro olívico para poner el empate en el marcador, todas ellas de la mano de su mejor jugador, Iago Aspas. En un primer momento, el Príncipe de las Bateas se topó con la intervención clave de Thibaut Courtois a un potente disparo suyo tras una gran pared con Brais Méndez. En segunda instancia, entre la cabeza de Casemiro y el poste repelieron la falta ejecutada a la perfección por el ‘10’ celeste desde la luna del área.

Iago Aspas chuta a puerta ante la oposición de Nacho | Imagen: LaLiga
Iago Aspas chuta a puerta ante la oposición de Nacho | Imagen: LaLiga

El ‘Chacho’ Coudet buscaba el empate introduciendo varios cambios, destacando los de Augusto Solari (lesionado poco tiempo después por una posible ruptura en el aductor de la pierna izquierda) y Facundo Ferreyra por Nolito y Jeison Murillo, respectivamente. Pero su equipo murió en la orilla, incapaz de anotar el gol del empate a dos.

Muerte en la orilla

En el último minuto del tiempo de descuento, los visitantes montaron su enésimo contragolpe del partido, que acabó convirtiéndose en el 1-3 definitivo. Benzema se plantó en el área y le regaló el gol a un Marco Asensio que entró en la segunda mitad sustituyendo a Toni Kroos.

Marco Asensio empuja a portería el 1-3 | Imagen: Real Madrid
Marco Asensio empuja a portería el 1-3 | Imagen: Real Madrid

El Celta murió de pie, luchando hasta el final por llevarse al menos un punto ante el vigente campeón de Liga. Tropezó otra vez con la misma piedra y contra el mismo rival, los errores en salida de balón. Estos descuidos se pagan caros frente a este tipo de equipos.

Ahora les toca un tiempo de descanso antes de volver al trabajo para preparar el próximo partido en Mendizorroza ante el Alavés.