Para terminar la semana más crucial de esta temporada del Real Madrid, los blancos viajarán a Liverpool para disputar el partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League. Tras la victoria en el partido de ida la semana pasada y de sacar los tres puntos de El Clásico el pasado fin de semana, los ánimos y las sensaciones están por todo lo alto para culminar la eliminatoria.

·Nada que perder

Los de Klopp ya se olvidaron del título de liga hace tiempo, y solo optan a la Champions League como título importante con el que soñar esta temporada. Con el 3-1 en contra de la ida, los reds no tienen nada que perder y saldrán a dejarlo todo en el terreno de juego. Siempre es peligroso jugar contra alguien que tiene mucho que ganar y poco que perder, y más aún si tienen el antecedente de remontar aquel 3-0 al Barcelona.

·Sus dos extremos

El ataque del Liverpool, que siempre ha destacado por su eficacia, liderado por Salah y Mané en los extremos, esta temporada no están brillando por su acierto. Aún así, en las últimas semanas, los dos africanos han recuperado su forma y vuelven a destacar en la Premier League. Nunca se puede infravalorar o confiarse ante jugadores de su talla, y el Real Madrid hará bien en mantener su solidez y concentración en defensa para no sufrir o llevarse una sorpresa este miércoles.

·Bajas en defensa

El Liverpool, por contrario, tiene una cantidad importante de bajas en su defensa. Tuvieron que apañarse en el mercado de invierno para traer dos centrales, formando una defensa que lejos se queda del nivel que llegó a demostrar en años anteriores. Este es un aspecto en el que coinciden con el Real Madrid, que llega sin la mayoría de defensores titulares, y también tendrá que arreglárselas con la lesión de Lucas Vázquez hace unos días.

·Espacios atrás

Por último, un punto clave que habrá analizado Zidane es el tema de los espacios que deja atrás el Liverpool. Ya pasó en el partido de ida, algo que el equipo madridista supo aprovechar bien. El equipo inglés se volcaba en ataque, pero dejando muchos huecos defensivos. Si no son capaces de corregir esto, este miércoles los blancos volverán a tener la opción de decidir la eliminatoria en esas jugadas de contraataque que deja vendido al Liverpool.

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