Nabil Fekir volvió a brillar un partido más en el encuentro que acabó empatando su equipo ante el Valencia en el Villamarín. El francés fue autor del primer tanto del partido que sirvió para poner a los suyos por delante. Tras una jugada ensayada tras un saque en corto de un córner, el francés esperaba solo en la frontal para el remate y ahí le puso Joaquín Sánchez el balón. El media punta bético cazó el esférico con una espectacular volea con la izquierda, que consiguió esquivar todas las piernas que encontró a su paso y botó en el césped antes de colarse en la meta defendida por Jaume Doménech, que nada pudo hacer para atajarlo.

Con este, Nabil Fekir suma cuatro tantos esta temporada en LaLiga (el tercero desde que comenzó el año) que junto a sus cinco asistencias los convierten en uno de los hombres claves del club en la generación de oportunidades de gol.

Pero más allá del gol, el francés brilló en la creación del juego de su equipo. Estuvo muy activo, sobre todo, en la primera mitad, en la que contaba con Joaquín Canales como socios principales, sobre todo, el portuense, y con Emerson Royal cuando volcaba el ataque a la derecha.

Como el resto del equipo, el jugador se dejó parte de su inspiración en los vestuarios en el descanso, y su segunda parte estuvo lejos del nivel mostrado en la primera, sobre todo, porque esos socios que le habían aguantado el ritmo los primeros cuarenta y cinco minutos no estuvieron al mismo nivel en los segundos.

En el minuto 70, Pellegrini decidió sacarlo del terreno de juego, para dejar su sitio a Willian Carvalho, con el objetivo de darle descanso pensando en la doble jornada que le espera esta semana al equipo. En ese momento, los verdiblancos bajaron el nivel de juego considerablemente y acusaron la ausencia del francés, sobre todo, a la hora de aprovechar los espacios y generar ocasiones tras transiciones rápidas.

Pese al empate final del equipo, el internacional francés parece más inspirado que nunca y es uno de los principales culpables de la buena racha que atraviesa su equipo desde que empezó el año. El '8' bético ha conseguido dejar atrás todas esas críticas que ponían en duda su compromiso con el club y parece más interesado que nadie en sacar el pasaporte europeo para la próxima campaña.