El tramo final y decisivo de la temporada ya ha empezado, después de una temporada con muchas dudas e incertidumbres, el equipo dirigido por Ronald Koeman tiene la posibilidad de levantar el doblete a final de temporada. Actualmente el conjunto azulgrana depende de sí mismo para ser campeón de liga. Para ello, deberán ganar seis de los siete partidos restantes con la posibilidad de empatar el séptimo. Un reto exigente para los jugadores, que si algo han demostrado está temporada es que están perfectamente capacitados para lograrlo. El primero de estos siete partidos es el de este jueves 29 de abril frente al Granada en el Camp Nou a las 19:00. El equipo se ha ejercitado este miércoles en el Campo Tito Vilanova pensando en el partido contra los andaluces.

El objetivo de la sesión de entrenamiento consistía en activar a la plantilla para que lleguen en perfectas condiciones al partido. Al tratarse de un entrenamiento previo al partido, Koeman no ha optado por un trabajo muy físico para no sobrecargar a los jugadores. Durante la sesión se ha podido observar los ejercicios más clásicos, como rondós, trabajos de posesión y varios juegos en equipo para favorecer la dinámica entre los jugadores. Tampoco ha podido faltar el típico partido final para terminar la sesión.

Por suerte, no está siendo una temporada plagada de lesiones para la plantilla y Koeman tiene a su disponibilidad a casi todos los miembros del equipo, a excepción de las ya conocidas bajas de Ansu Fati y Coutinho. El Barça comunicaba el pasado martes 27 de abril la vuelta de Miralem Pjanic a los entrenamientos con el grupo.  La baja del bosnio causó la irrupción del centro campista del filial Ilaix Moriba, el canterano se ha adaptado a la perfección a la dinámica del primer equipo y ha disputado ya once partidos, todos ellos entrando desde el banquillo pero dejando detalles, esfuerzo y algún que otro gol. Parece que todo está de cara a que el final de temporada del equipo sea intenso pero positivo para el aficionado culé.