El Chelsea recibe al Real Madrid en Stamford Bridge el próximo martes a las 21 horas para disputar el partido de vuelta de las semifinales de la Champions League. En la ida los dos equipos finalizaron el partido con un 1-1 en el marcador, un resultado que deja muy abierto el partido del martes.

Con la llegada de Tuchel al banquillo blue, el conjunto inglés ha cambiado su estilo de juego. El alemán organiza a su equipo con un planteamiento ofensivo muy marcado, utilizando el esquema del 3-4-3 que puede convertirse en un 4-2-3-1 o en un 5-3-1-1, dependiendo de las circunstancias del encuentro y las características del rival. En términos defensivos el nuevo Chelsea de Tuchel ejerce una alta presión cuando pierde el balón, además los jugadores son capaces de defender de manera individual las zonas de peligro.

En el partido de ida en el Di Stéfano, el equipo londinense comenzó el encuentro con un ritmo muy alto de juego y una alta presión en los primeros minutos, lo que le llevó a marcar el primer gol en el minuto 15. Al término del encuentro era el Real Madrid quien tenía más controlado el partido pero no fue suficiente para cambiar el marcador.

Para recibir al Real Madrid, Tuchel podrá contar con todos sus efectivos, menos Mateo  Kovacic y  Antonio Rudiger. El croata padece una lesión muscular que ya le hizo perderse la ida y el alemán se marchó con molestias después del choque en el di Stéfano.

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El capitán del conjunto blue no terminaba de convencer a Lampard, pero desde la llegada del alemán Tuchel al banquillo parece que se encuentra más cómodo ocupando la posición de central en línea de tres. Marcos Alonso ha sido otros jugadores dinamizados por el alemán ya que el planteamiento de Tuchel favorece a su estilo de juego. Kovacic, era un jugador determinante para Lampard, pero con la llegada de Tuchel ha visto potenciada su calidad en el terreno de juego.

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