Ronald Koeman se siente respaldado para continuar al frente del banquillo del Fútbol Club Barcelona. Así lo ha asegurado ante los medios de comunicación en la víspera del partido que el equipo disputará este domingo ante el Real Club Celta de Vigo, correspondiente a la penúltima jornada del campeonato liguero. Lo ha hecho dos días después de reunirse con Joan Laporta y el vicepresidente deportivo del club, Rafael Yuste y reivindicando el trabajo que ha llevado a cabo en la presente temporada junto a su staff técnico. "Para mí, hay que juzgar la temporada entera. Ha habido dificultades. Estamos decepcionados por no haber aprovechado la ocasión de ser líderes. Lo importante para un entrenador es sentir que tienes la confianza por parte del club. Puedo y quiero seguir si es así. Quedamos en hablar al final de la temporada. Veo mucho margen de mejora. No es un camino que acaba ahora. Hemos mejorado cosas. Haber dicho que era perfecto hace dos semanas y venir ahora a decir que todo es horrible no es justo", comentaba el técnico de Zaandam al ser preguntado por los problemas que el equipo ha ido sufriendo a lo largo del presente curso y por la imagen dada por la plantilla desde que ganaron la Copa del Rey hasta la lucha por la Liga, en la que siguen inmersos aunque con escasas posibilidades y con el Atlético de Madrid y el Real Madrid como principales favoritos a hacerse con el título.

"No estoy decepcionado con mis jugadores. También ha sido un año muy complicado para ellos. Hay cinco o seis jugadores que han perdido 35 o 40 partidos entre todas las competiciones. Únicamente pudimos fichar a un jugador. Se pueden discutir los cambios durante un partido y no tengo ni un problema por eso, pero la afición ha visto a un equipo que ha hecho partidos fantásticos, que ha demostrado tener mucho hambre y reconociendo que, a veces, no ganamos partidos clave y que ese no es el nivel que tenemos que dar. El equipo tiene futuro", recalcaba el holandés sin querer hacer alusión a las necesidades que el equipo tiene en algunas demarcaciones de cara al inicio de la próxima temporada. "No es el momento. Faltan dos partidos y me gustaría hablarlo después. Hay que respetar a los jugadores que tenemos, que tienen que ganar estos partidos. Si podemos fichar lo que pensamos, podemos estar ilusionados con el año que viene", aseguraba admitiendo que le hubiera gustado contar con más delanteros por las lesiones de Ansu Fati y Philippe Coutinho, que llevan muchos meses de baja: "Me gustaría que marcáramos más. No podemos depender de Messi. Necesitamos más jugadores con gol. Somos el segundo equipo de Europa con más goles en una temporada por detrás del Bayern. Junto con el City, somos el que más ocasiones crea. Nuestra mentalidad es atacar siempre y tener el balón. Así es el Barça. Lo único que hay que mejorar es el porcentaje de efectividad. Hemos tenido poca gente arriba con Ansu casi toda la temporada fuera".

Además, Ronald Koeman se reivindicó como hombre de club por tener que prescindir de Óscar Mingueza contra el conjunto vigués este domingo para que el jugador pueda ayudar al filial en la fase de ascenso a Segunda. "A pesar de nuestra situación, he querido dejar jugar a Mingueza con el filial. Hay que darle las gracias al jugador y destacar que él ha querido estar", aseguraba.

Por último, no quiso dejar pasar la posibilidad de valorar la oportunidad que el equipo femenino tiene por delante, ya que, este mismo domingo, podría proclamarse campeón de Europa: "He visto partidos del femenino y he de decir que están en un muy buen camino. La prueba es que pueden ganar la Champions. Es importante para ellas y para el club. Saben que han llegado allí por méritos propios. Ellas saben tienen juego, ambición y calidad. Ojalá que, además de disfrutar de jugar la final, puedan ganar".